e el salario mínimo alcance los 9,582.47 pesos mensuales para 2026 representa un avance en cuanto a recuperación del poder adquisitivo, pero también un reto para los trabajadores de apps que como parte del programa piloto del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), buscan su acces pleno a la seguridad social.
De acuerdo con los lineamientos del programa, para que una persona pueda ser afiliada y reciba todos los seguros de IMSS, que incluyen enfermedades y maternidad, riesgos de trabajo, invalidez y vida, retiro, cesantía en edad avanzada y vejez, guarderías y prestaciones sociales, debe obtener cuando menos un salario mínimo de ingreso neto por su trabajo en la aplicación; es decir, después del monto de exclusión.
“El problema es que ahora, aunque tú estés trabajando, tengas una actividad incluso de cuatro o cinco horas y entregas productos y demás, no serás considerado trabajador si no alcanzas a cubrir el tema del salario mínimo neto, y al incrementarse eso va a dificultar más alcanzar un nivel mínimo de pago de seguridad social”, dice Manuel Fuentes, abogado especialista en derecho laboral individual y colectivo.
A finales del mes de noviembre de 2025, y a través de la prueba piloto obligatorio de plataformas digitalesEl resultado de dicho descuento es el que contabiliza para la afiliación al IMSS, que a partir del 1 de enero de 2026 la deducción será la siguiente:
- A – autos eléctricos o análogos: 36%
- B – motos de combustión interna, eléctricas o análogas: 30%
- C – Transportes no motorizados (bicicletas o sin medio de transporte): 12%
Hablar de los descuentos ha sido fundamental, porque es a partir del resultado de los mismos donde se sabe si se tiene acceso pleno o no al seguro social, y es que como la propia regulación lo exigió, del total bruto se descuenta el porcentaje según el vehículo que se tiene, y ese ha sido el problema para quienes acceden al servicio y quienes no.
Sobre ello, Fuentes reconoce que las personas tienen que duplicar o triplicar sus ingresos para alcanzar el salario mínimo, el ejemplo es claro, de los más de un millón de conductores y repartidores que se afiliaron al Instituto, no todos alcanzaron el umbral requerido.
Debido a lo anterior solo obtuvieron el seguro de riesgos de trabajo, el cual protege en caso de accidentes en trayecto o enfermedad durante el desempeño del servicio prestado mediante la plataforma y brinda el derecho de pago del 100% de su salario registrado el tiempo que dura la incapacidad.
De esta forma, de los más de un millón de inscritos en las 15 plataformas registradas, solo 164,205 superaron el umbral del ingreso neto mensual, el problema es que ya sea que alcancen o no el monto de registro, la aplicación realiza el descuento, advierte el especialista.
“Las plataformas sí cobran a los usuarios el costo de la seguridad social; sin embargo, ni siquiera 10% de ellos tienen seguridad social”, refiere el abogado, quien recuerda que al solicitar un viaje, les ha preguntado a conductores si cuentan con seguro social, y estos responden que no, pero al ver la aplicación, encuentra que, como en el caso de Uber, se realiza el cobro de una comisión: «Ajuste al usuario por la ley laboral», y eso no garantiza que al final se cuente con el aseguramiento al IMSS.
Según información oficial, el salario promedio diario asociado de conductores y repartidores es de 393.9 pesos, que hasta ahora es más del mínimo (278.80 pesos), pero a esto, Manuel Fuentes recuerda se le debe considerar no solo el descuento que exige la reforma sobre plataformas digitales, sino también otros gastos adicionales como gasolina y mantenimiento de los vehículos.
“Los costos adicionales que tienen que alcanzar cuando usan un vehículo, automotor, una motocicleta o bicicleta, eso representa porcentajes superiores al salario mínimo. Entonces enfrentan obstáculos para alcanzar el aseguramiento”, puntualiza.
Subraya que el ideal es que el aseguramiento no esté condicionado al salario mínimo general, especialmente en un año donde habrá incrementos que, aunque beneficiarán a un sector considerable de la población, a los repartidores y conductores supone desventaja, por ello, sugiere que el cálculo considere las horas trabajadas y el ingreso obtenido.
“Debiera haber un equilibrio de las horas o el tiempo de trabajo y que en todo caso este concepto del salario mínimo se pudiera dividir entre los días de trabajo. A veces alguien trabajará dos o tres días a la semana, en promedio 12 al mes, pero esos se dividen entre 30 y la cantidad es inferior, se tiene que dividir entre los días de trabajo”, apunta.
Sugiere que la normativa tenga ajustes que vayan en beneficio de las personas trabajadoras de forma que se garantice su protección plena. “Es tiempo para que puedan reflexionar (autoridades y legisladores) y que realmente beneficie a la mayoría de los trabajadores de plataformas. Actualmente no se está logrando el objetivo”, concluye.
