Por considerar que la voz e imagen de la presidenta municipal y de los integrantes del Cabildo son datos personales que han sido utilizados para generar ataques en redes sociales, el Ayuntamiento de Múzquiz aprobó por mayoría prohibir a sus miembros y particulares grabar las sesiones o realizar trasmisiones en vivo.
Sólo el área de Comunicación municipal lo podrá hacer, aunque en la actualidad no trasmite en directo las actividades.
Durante la sesión se evidenció que la propuesta presentada por los y las regidores del PRI, al que pertenece la presidenta municipal de Múzquiz, Laura Patricia Jiménez Gutiérrez y quien es prima del gobernador Manolo Jiménez Salinas, estaba dirigida a las regidoras de Morena y del Partido del Trabajo, Marcela Amaya Carrizalez y Alicia Angélica Pruneda Álvarez, respectivamente, quienes hacen trasmisiones en vivo en las que se ha observado cómo el síndico y esposo de la presidenta municipal, Héctor Miguel García Falcón, dirige en ocasiones los debates.
El regidor Caleb García Ramírez fue quien leyó la propuesta firmada por cinco regidoras y tres regidores del tricolor.
“Se ha identificado la necesidad de regular la participación de los miembros del cabildo a fin de evitar usos indebidos, manipulaciones o difusión parcial que pudieran vulnerar los derechos a la imagen, privacidad honor y reputación, reconocidos tanto por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos como por los tratados internacionales suscritos por nuestro país”, señalo el regidor.
Agregó que la Ley General de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados y la del estado de Coahuila “establecen que la imagen, la voz y cualquier elemento identificable constituyen datos personales que deben ser tratados bajo principios de licitud, consentimiento, finalidad y proporcionalidad”.
Las regidoras respondieron que se trataba de una ilegalidad que afecta la libertad de expresión, la transparencia y que como funcionarios públicos están bajo el escrutinio público, por lo que anunciaron acciones legales.
“Lo que hoy se propone es tan contradictorio que se anula solo. Por un lado, reconocen que las sesiones deben de ser públicas, transparentes y abiertas y por el otro lado quieren decidir quién puede grabar, cuándo pueden grabar y qué parte se puede ver. Es como decir: sí hay transparencia, pero si la controlo yo. Las sesiones de cabildo no son ceremonias privadas, no son cafés y no son propiedad de la comunicación social, son actos públicos por mandato constitucional donde nuestra obligación es estar abiertos a la transparencia y rendición de cuentas con la gente, con el pueblo, con los que confiaron en nosotros”, les respondió Amaya Carrizales.
En tanto Alma Rosa Franco Romero, también de Morena, le dijo a la presidenta municipal que la propuesta la ponía a ella como una funcionaria opresora que quiere controlar al Cabildo, pero Jiménez Gutiérrez la interrumpió para decirle que estaba entendiendo mal y al ver que Amaya Carrizalez la grababa le pidió que no lo hiciera y optó por dejar de hablar.
