El Gobierno de Guatemala encabezado por el presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei decretó un estado de sitio en los municipios de Ixchiguán y Tajumulco de San Marcos, provincia ubicada en el oeste del país y fronteriza con México, tras la desaparición de dos personas el pasado 3 de junio.
En un comunicado de la Secretaría de Comunicación Social, señaló que el estado de sitio obedece a la “vulnerabilidad de la zona”, tras un informe emitido por el Ministerio de la Defensa.
El gobierno aplica que su decisión obedece a los “actos violentos” ejecutados por “habitantes y grupos armados” de la zona que han atacado “a la población y fuerzas de seguridad”.
Dichos ataques ponen “en riesgo la vida, libertad, justicia, seguridad, paz y desarrollo” de la región, señala el texto.
Ayer, miércoles, la Procuraduría de los Derechos Humanos exigió la aparición de dos trabajadores de una empresa que trasladaba dinero en efectivo en autos blindados el pasado 3 de junio en San Marcos.
El secuestro fue confirmado por la misma empresa privada en un comunicado en el que señalan que desconocen el paradero de sus trabajadores y que al momento de lo acontecido no llevaban objetos de valor.
El estado de sitio promovido por el Gobierno de Giammattei tendrá una duración de 30 días, pero aún debe ser ratificado por el Congreso guatemalteco en un plazo de 3 días.
La decisión del mandatario guatemalteco restringe garantías constitucionales como la libre locomoción y la posibilidad de llevar a cabo detenciones sin orden judicial, según la Ley de Orden Público y Estados de Excepción.