Rusia lanzó drones, misiles y bombas aéreas guiadas sobre Ucrania la madrugada del domingo, matando a cinco personas en un fuerte ataque nocturno que, según las autoridades ucranias, tuvo como objetivo infraestructura civil.

Moscú disparó 53 misiles balísticos y de crucero y envió 496 drones, detalló la fuerza aérea ucrania. El presidente de Ucrania, Volodymir Zelensky, dijo que nueve regiones del país fueron impactadas.

Cuatro personas, incluido un adolescente de 15 años, murieron en un ataque combinado de drones y misiles en Leópolis, informaron autoridades regionales y el servicio de emergencia de Ucrania.

Fue el mayor asalto aéreo contra la histórica ciudad occidental y la región circundante desde la invasión a gran escala de Rusia el 24 de febrero de 2022, según Maksym Kozytskyi, jefe de la administración militar local. Al principio de la guerra, Leópolis era considerada un refugio frente a los combates y la destrucción que se extendían más al este.

En una publicación de Telegram, Kozytskyi dijo que Rusia lanzó alrededor de 140 drones Shahed y 23 misiles balísticos en la región. Al menos otras seis personas resultaron heridas, según un comunicado de la policía de Ucrania.

El ataque dejó a dos distritos de Leópolis sin electricidad y el transporte público suspendido durante unas horas temprano el domingo, indicó el alcalde Andriy Sadovyi. Añadió que un complejo empresarial en las afueras de Leópolis estaba en llamas tras el ataque, y lo describió como una instalación civil no vinculada al esfuerzo bélico ucranio.

Una persona también resultó herida en la región de Ivano-Frankivsk al sur de Leópolis, según la gobernadora local Svitlana Onyshchuk.

En la ciudad sureña de Zaporiyia, un asalto aéreo mató a una mujer civil e hirió a otras nueve personas, incluida una adolescente de 16 años, señaló el gobernador regional Ivan Fedorov. Dijo que Rusia atacó con drones y bombas aéreas guiadas.

Fedorov añadió que el ataque destruyó edificios residenciales y dejó a unas 73 mil viviendas en Zaporiyia y áreas circundantes sin electricidad.

El Ministerio de Defensa de Rusia sostuvo que los ataques nocturnos fueron contra el «complejo militar-industrial» de Ucrania y las instalaciones energéticas que lo abastecen.

Por otro lado, seis personas, incluido un niño, resultaron heridas en Sloviansk, una ciudad clave en la región oriental de Donetsk que permanece bajo control ucraniano, después que una bomba aérea guiada rusa impactara en un bloque de apartamentos, informó la fiscalía regional el domingo. Los ataques aéreos rusos del sábado por la noche dañaron más de dos docenas de edificios residenciales en Sloviansk, así como autos, tiendas y una cafetería, agregó la fiscalía.

Zelensky reiteró el domingo su llamado a los socios occidentales de Kiev de que envíen defensas antiaéreas adicionales para combatir el «terror aéreo» de Rusia.

“Hoy, los rusos nuevamente apuntaron a nuestra infraestructura, todo lo que asegura que la gente pueda vivir una vida normal. Necesitamos más protección, una implementación rápida de todos los acuerdos de defensa, especialmente en defensa antiaérea, para hacer que este terror aéreo sea inútil”, dijo en una publicación de Telegram.

Ucrania lleva meses realizando sus propios ataques de largo alcance en Rusia, muchos de los cuales han tenido como objetivo la infraestructura petrolera de Moscú y han contribuido a la persistente escasez de combustible.

El Ministerio de Defensa de Rusia manifestó que sus fuerzas derribaron 32 drones ucranianos durante la noche, con al menos 50 más derribados durante el día en el suroeste de Rusia.

Drones dañaron varias casas, autos y una línea eléctrica en la región de Belgorod, fronteriza con Ucrania, según el gobernador local Vyacheslav Gladkov. Por separado, informó que un bombardeo ucraniano hirió gravemente al subdirector de una aldea fronteriza.

Por su parte, el Kremlin ha intensificado los ataques a la red eléctrica de Ucrania antes del invierno, como en años anteriores desde la invasión a gran escala el 24 de febrero de 2022. Kiev lo describe como un intento de usar el frío como arma al negar a los civiles calefacción, luz y agua potable.

Serhii Koretskyi, director ejecutivo del grupo estatal ucraniano Naftogaz, afirmó que el ataque del domingo provocó nuevos daños a gran escala en la infraestructura de gas que abastece a la población civil, tan solo dos días después de lo que, según la compañía, fue el mayor ataque ruso contra sus instalaciones desde la invasión total.

El objetivo de Rusia era privar a los ucranios de gas, calefacción y electricidad, según declaró Koretskyi a Naftogaz. La compañía no dio más detalles sobre los daños causados ​​por el último ataque.

Moscú también ha intensificado los ataques aéreos en la red ferroviaria de Ucrania, que es esencial para el transporte militar, golpeándola casi todos los días durante los últimos dos meses. Drones rusos atacaron el sábado una estación de tren en la ciudad norteña de Shostka, donde mataron a una persona e hirieron a decenas.

El jueves, el presidente ruso Vladimir Putin redobló las advertencias de que cualquier suministro de armas de largo alcance por parte de Estados Unidos a Ucrania dañará seriamente las relaciones bilaterales.

El posible suministro de misiles de crucero Tomahawk de Estados Unidos a Kiev marcará una “nueva etapa cualitativa de escalada, incluso en las relaciones entre Rusia y Estados Unidos”, aseveró Putin en un foro de expertos internacionales en política exterior en el balneario ruso del Mar Negro de Sochi.

Las declaraciones de Putin siguieron a un aparente cambio drástico en la política de Estados Unidos hacia Ucrania, luego que el presidente estadounidense Donald Trump dijera a finales del mes pasado que creía que Ucrania podría recuperar todo el territorio perdido ante Rusia.

Trump anteriormente había pedido varias veces a Kiev que hiciera concesiones para poner fin a la guerra, y puso fin al aislamiento diplomático de Putin en Occidente al recibirlo en una cumbre en Alaska el 15 de agosto.