El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, notificó al Congreso de su país que empezará a usar la fuerza letal de las fuerzas armadas del Pentágono para contrarrestar y destruir a los cárteles del narcotráfico denominados como grupos terroristas por su administración. 

“Estados Unidos ha llegado a un punto crítico donde debemos usar la fuerza para defendernos y defender a otros contra estos ataques que están llevando a cabo esas organizaciones designadas como terroristas”, se resalta en la notificación que Trump envió al Capitolio. 

El mandatario estadunidense ya había dado atisbos de que por mar y tierra autorizaría al Departamento de Guerra a usar su fuerza letal en contra de los grupos del narcotráfico internacional que fueran captados en el acto del trasiego de narcóticos hacia Estados Unidos. 

Desde el pasado 20 de enero, cuando inició su segundo mandato como presidente, Trump firmó una orden ejecutiva con la que designó a los cárteles del narcotráfico de México, Centro y Sudamérica como grupos del terrorismo internacional. 

Hace unas semanas, el Pentágono destruyó en aguas del Caribe tres lanchas rápidas por orden de Trump, matando a más de una docena de personas por presuntamente transportar drogas destinadas a Estados Unidos y por ser miembros de cárteles venezolanos. 

En la notificación al Congreso, el mandatario les explica justamente este caso a los legisladores, anotando que las personas eliminadas pertenecían a la organización narcoterrorista Tren de Aragua, de Venezuela, esto sin presentar evidencias de la carga ni de la afiliación de los muertos. 

Desde el inicio de su segundo mandato presidencial, Trump ha politizado la estrategia contra el narcotráfico en el caso de Venezuela, declarando al presidente de ese país, Nicolás Maduro, como líder del Cártel de los Soles y del Tren de Aragua, amén de ofrecer por él una recompensa de 15 millones de dólares. 

Respecto a los cárteles mexicanos, Trump ha insistido en que éstos prácticamente gobiernan en México, porque la presidente Claudia Sheinbaum les tiene miedo, no obstante a que en diversas declaraciones oficiales reconoce y aplaude la cooperación bilateral antinarcóticos. 

Sobre la mayoría de los más de tres mil 500 kilómetros de la frontera sur que colinda con la del norte de México, Trump ordenó del despliegue de más de 10 mil soldados del Comando Norte, quienes ahora, bajo la nueva directriz, podrían usar la fuerza letal contra los narcos. 

Además de la presencia del Comando Norte en la frontera sur de Estados Unidos, Trump ordenó la navegación de buques militares del Pentágono en el Golfo de México (Golfo de América) y en el Pacífico, sobre aguas colindantes con el territorio marítimo mexicano. 

También para el combate y cooperación en la lucha contra el narcotráfico mexicano, Trump ordenó al Pentágono utilizar drones de espionaje sobre la República Mexicana; tras conocerse ese hecho, la presidenta Sheinbaum aclaró que su gobierno lo autorizó. 

En el Capitolio, tras recibir la notificación de Trump, algunos legisladores demócratas pusieron en duda la constitucionalidad de usar la fuerza letal contra los cárteles del narcotráfico, aunque hayan sido catalogados como grupos del terrorismo internacional por la Casa Blanca. 

Bajo el Acta de Combate contra Enemigos Extranjeros y contra el Terrorismo Internacional, Trump justifica la decisión de usar la fuerza bélica contra los cárteles del narcotráfico. 

Las leyes de Estados Unidos son claras en su guerra contra el terrorismo: a cualquier persona o agrupación asociados con los terroristas los designa inmediatamente igual, por lo que sale a relucir la pregunta sobre si a los narcotraficantes y cárteles estadunidenses asociados o en relación con los mexicanos los pondrá también en la mira de las armas letales del Pentágono.