Fitch Ratings mejoró la calificación de Petróleos Mexicanos (Pemex) de «BB» a «BB+» en sus notas de largo plazo en moneda local y extranjera, con perspectiva estable.
La calificadora detalló este jueves que también retiró la observación positiva en la que mantenía a la empresa productiva del Estado.
El ajuste de Fitch Ratings a la calificación de Pemex se da luego de «exitosa ejecución» de la oferta de recompra de bonos con vencimientos entre 2026 y 2029 por un máximo de 9,900 millones de dólares, la cual se completó el 30 de septiembre y abarcó 11 series de bonos en dólares y euros.
«La transacción indica una mayor vinculación entre PEMEX y el soberano, lo que se traduce en un aumento en la evaluación de Supervisión, Vinculación y Apoyo (OLS por su sigla en inglés) de la compañía», argumentó la calificadora en comunicado.
El Gobierno federal lanzó hace unas semanas un ambicioso plan para la empresa por el que espera que logre la autosuficiencia financiera en el 2027.
Con este ajuste, Fitch califica a Petróleos Mexicanos solo un nivel por debajo de la calificación soberana de México, en lugar de dos niveles por debajo.
Pese a la mejora de calificación, la agencia consideró que la petrolera todavía tiene un «perfil financiero débil», con limitaciones de liquidez y bajos niveles de producción. Y alertó sobre el riesgo de subinversión en activos estratégicos, tanto en exploración como en refinación.
Tras observar diversos retos operativos y financieros, Fitch destacó que el perfil crediticio independiente de Pemex se mantiene en «ccc».
La deuda financiera de Pemex ronda los 99,000 millones de dólares y la de proveedores unos 23,000 millones de dólares.