El diputado federal Rubén Moreira Valdez alertó sobre la grave disminución de recursos destinados a la conservación y mantenimiento de carreteras, caminos rurales, calles y avenidas en todo el país, particularmente en la Ciudad de México, que registra un deterioro histórico en la infraestructura urbana donde los baches y socavones han proliferado por todas las zonas de la capital.
En el programa Con Peras, Manzanas y Naranjas, el legislador del PRI señaló que, mientras en 2018 se destinaron 34 mil millones de pesos a la conservación de carreteras, este 2025 apenas se presupuestaron 21 mil millones, y gran parte de esos recursos aún no están asignados.
En mesa de análisis con los especialistas Mario Di Costanzo y Francisco Lezama y los abogados Miguel Ángel Sulub y Julián Proa, recordaron que el Ramo 23, que antes financiaba obras de infraestructura en municipios y ciudades, ha presentado reducciones drásticas, destinando más del 50 por ciento de su presupuesto actual a otras obras, sin etiquetar recursos específicos para vialidades.
Sobre la crisis que se vive por baches, Julián Proa presentó datos de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del INEGI, de julio de 2025, que revela que 83 por ciento de la población considera que los baches son el principal problema de las ciudades, seguido por fugas de agua, con 66.4 por ciento y coladeras tapadas, con 60 por ciento, que juntos aceleran el deterioro del pavimento.
Enfatizó que la desaparición de cuatro fondos clave ha privado a la Ciudad de México de recursos esenciales: primero el Fondo de Pavimentación que contaba con 5 mil millones de pesos anuales; el Fondo para la Accesibilidad en el Transporte Público (FORTRADIS), con 425 millones anuales; el Fondo Metropolitano, con 5 mil millones anuales, y el Fondo de Capitalidad, con 2 mil 800 millones anuales, exclusivamente para la capital.
“En conjunto, son 91 mil millones de pesos acumulados que dejaron de destinarse al bacheo y pavimentación. Solo la Ciudad de México perdió alrededor de 18 mil millones de pesos por la desaparición del Fondo de Capitalidad”, detallaron los especialistas.
En su intervención, Mario Di Costanzo subrayó que los programas implementados para resolver la situación, como el llamado “Bachetón”, han sido insuficientes y mal ejecutados. “Las reparaciones no son duraderas y no existe un programa integral de infraestructura que incluya obra hidráulica, lo que provoca que los baches reaparezcan”, anotó.
Rubén Moreira, Julián Proa, Mario Di Costanzo y Paco Lezama advirtieron que la falta de mantenimiento ha generado más accidentes, afectando especialmente a motociclistas, quienes no pueden detectar los baches durante la lluvia, así como costos elevados de reparación para automovilistas. Destacaron que Ecatepec, Estado de México; Hermosillo, Sonora, y Acapulco, Guerrero, son las ciudades más dañadas, mientras que en la Ciudad de México las alcaldías Gustavo A. Madero, Xochimilco y Tláhuac son las más afectadas.
Por lo anterior, Moreira Valdez ha insistido en diversas ocasiones en la necesidad de restituir los fondos desaparecidos, etiquetar recursos específicos en el Presupuesto 2026 para calles, carreteras y drenaje, así como garantizar que el gasto federal y local en infraestructura no se desvíe para otro tipo de obras que no sean prioritarias.