Luego de que concluyeron la caminata que los trajo desde el norte del estado de Jalisco hasta la Ciudad de México, los integrantes de la Caravana por la Dignidad y la Conciencia Wixárika empezaron a acondicionar el plantón en el que se quedarán frente a Palacio Nacional, hasta conseguir un encuentro con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Desde el viernes en la tarde, los participantes de la marcha cuentan con dos carpas que los resguardan del sol –donadas por grupos que apoyan su lucha–, además de que instalaron unas 50 tiendas de campaña que ellos compraron de su bolsillo. En uno de los costados del campamento ya tienen cuatro casetas de baño portátiles, facilitadas por el gobierno federal, en espera de recibir cuatro más.
“En primera instancia nos íbamos a quedar allá (en la explanada contigua al Museo del Templo Mayor), pero el chiste era venirnos frente a Palacio Nacional, entonces se cambió la instalación para este lado”, explicó en entrevista con La Jornada el secretario tradicional de la comunidad indígena de San Sebastián Teponahuaxtlán, Gustavo Bautista Torres.
Luego de reiterar que los manifestantes van a reforzar el plantón con más personas en caso de no ser recibidos mañana por el jefe del Ejecutivo, señaló que en este momento una de las prioridades de los wixárikas es recuperar fuerzas, tras la caminata de más de 900 kilómetros desde su lugar de origen, y dejar atrás la frustración de no ver a López Obrador el viernes.
“Ahorita estamos descansando y ya estamos más tranquilos. Hicimos la marcha para conmover al Presidente de la República; son casi mil kilómetros de donde somos hasta este punto, y es algo triste” (no haber sido recibidos), admitió.
Bautista agregó que los cerca de 170 participantes en la marcha –16 de ellos mujeres– se encuentran bien de salud y resaltó el papel del Congreso Nacional Indígena, la comunidad otomí residente en la Ciudad de México y otros grupos solidarios con su causa, pues son ellos quienes los están ayudando en el abastecimiento de comida, agua y otros insumos.
Por su parte, la Red Solidaria Anticapitalista lanzó una convocatoria en redes sociales para hacer un acopio para los integrantes de la caravana, con artículos como cobijas, colchonetas, papel higiénico y jabón para manos y para trastes, así como alimentos, agua y suero.
Las donaciones se recibirán en la Casa de los Pueblos Samir Flores Soberanes –la antigua sede del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas–, ubicada en Avenida México-Coyoacán 343, colonia Xoco.
Fuentes cercanas señalaron que ayer hubo una reunión entre los dirigentes de la caravana y funcionarios federales, sin que se alcanzara todavía ningún compromiso con respecto a la cita que piden los wixárikas para el lunes.