Por Víctor Barrera



La salida de Pablo Gómez de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), permite dar un paso a Claudia Sheinbaum para acomodar a las personas muy cercanas a ella o que estén en la línea con su administración.
Con este cambio, se promete que ahora si, Omar García Harfuch podrá trabajar con toda libertad y con acompañamiento para realizar las investigaciones sobre quienes están detrás de los cárteles mexicanos, es decir, quienes financian sus actos y quienes ayudan a realizar lo que se conoce como «lavado de dinero».


Pablo Gómez mostro que fue puesto ahí, para cubrir a quienes el oriundo de Macuspana deseaba y atacar a aquellos que se han mostrado contrarios a los pensamientos del tabasqueño.


Convirtiendo a la UIF más que una oficina de inteligencia en el brazo ejecutor de las venganzas de tabasqueño.


Además, esto también abre la oportunidad de que se empiecen a realizar otros cambios en direcciones de algunas oficinas de investigación en contra del lavado de dinero o políticas que puedan reforzar las investigaciones en contra de los cárteles del narcotráfico y personas involucradas con estos grupos delictivos.


Así García Harfuch podrá contar con el total apoyo de esas oficinas y colocará a personas cercanas a él para establecer la verdadera estrategia de seguridad e inteligencia que necesita el país.


Esto por supuesto que se nutrirá con el personal suficiente y altamente capacitado para estas tareas, además de garantizar que no habrá, ocultamiento o fuga de información que alerte a los delincuentes.
En cuestión operativa, ahora también se hará realidad el contar con personal adecuado para las tareas y ya no tendrá que pedir al secretario de la defensa permita que gente de la Guardia Nacional este a cargo de García Harfuch, que había sido la promesa del mismo General Trevilla, pero no se concretaba.


Veremos ahora si en las juntas semanales del Gabinete de Seguridad Nacional, Omar García tiene el verdadero control y sea quien establezca la estrategia a seguir. Lo que significará que se le deberá entregar toda la información a su disposición para conocer con toda seguridad los puntos rojos para localizar no solo a los ayudantes de los grupos delictivos sino empezar a llegar a las verdaderas cabezas de estos grupos y de paso a sus cómplices de cuello blanco.


Con esto, repito, todo indica que claudia Sheinbaum empieza a tomar el verdadero control de la administración federal y permitirá ir erradicando la fuerza que el oriundo de Macuspana mantuvo a lo largo de estos diez meses en el gobierno de Sheinbaum Pardo.


Lo primero que se espera de este cambio es la entrega, de parte de Pablo Gómez, de una copia de la información entregada a Estados Unidos sobre personas involucradas en lavado de dinero y en operaciones no muy claras que tiene ciertos nexos con el crimen organizado.


Esta información podría ser de utilidad importante para destruir esa estructura financiera que utilizaron los delincuentes de «cuello blanco» y que son los proveedores financieros de los grupos criminales.