Por Víctor Barrera
Primero porque el reto principal de la oposición es mantener las gobernaturas que tiene o de lo contrario Morena podría alcanzar una cantidad importante de estados gobernados. Esto le permitirá una gran capacidad de maniobra, porque las elecciones del 2024.
De acuerdo a las encuestas, ponen a Morena por lo menos con cuatro triunfos y a la oposición con dos, de las seis gobernaturas en disputa, Aguascalientes es seguro la retenga el PAN en la persona de Tere Jiménez, Durango, podría ser retenida por la oposición, sin embargo, existe una pequeña diferencia entre los dos opositores que van a la cabeza y esta seria definida hasta el próximo 5 de junio.
Tamaulipas, aun cuando las encuestas llevan de primer lugar a Morena y su candidato, que su única virtud es ser hijo de un ex gobernador, aun la moneda está en el aire, porque en un estado que logro cierta baja de la inseguridad, el enfrentamiento entre el gobernador Cabeza de Vaca y López Obrador, lo metió nuevamente en una tierra de conflictos, principalmente por el crimen organizado que sigue reclamando el territorio como suyo.
Hidalgo seria la gran sorpresa, porque hasta ahora el gobierno ha sido para el PRI, aunque en realidad Julio Ramón Menchaca es un político emanado del PRI, el cambio se debería mostrar entonces en un impulso de su desarrollo social y económico.
En cuanto a Oaxaca, es conocido que el gobernador Alejandro Murat, no pierde la oportunidad para elogiar a Andrés Manuel López Obrador y viceversa, acciones que tienen más la intención de estar cerca del poder que el beneficio de la población oaxaqueña.
En Quintana Roo, todo indica que será para Morena, pese a que el gobernador actual emano de una alianza del PAN y PRD, no lograran mantenerlo porque Carlos Joaquín trabaja solo para su beneficio y no para un grupo.
En 2024, Morena sabe bien que su candidato no tendrá el arrastre, populista, que aún mantiene López Obrador, por ello, el ganar una mayor cantidad de gobernaturas debe ser el objetivo, pese a que se violentes leyes electorales.
Morena no va a tener una elección presidencial a modo, porque las circunstancias serán distintas, ya no podrán enarbolar los banderines políticos utilizados como el combate a la corrupción, la falta de crecimiento económico, la enorme cantidad de pobreza y pobreza extrema en el país, porque estos ya serán resultados de esta administración, que por cierto ha hecho poco para cambiarle el rostro a México.
A esto se le debe sumar la existencia de algunos candidatos presidenciales que también podrían modificar las circunstancias a Morena, como lo son el joven Luis Donaldo Colosio Riojas y Ricardo Monreal, que como candidatos presidenciales podrían estar más en el ánimo del elector que algún candidato de la alianza Va por México o las corcholatas de Andrés Manuel López Obrador.
Por todo esto, los comicios de este año tienen una gran importancia política y social en el país.