En abril, se registró una inflación general anual de 7.68 por ciento, el nivel más alto para un mismo periodo desde el 2000, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El organismo informó que tan solo en abril, la inflación fue de 0.54 por ciento.
Esto es su tercer registro acelerándose de manera consecutiva, y 14 meses al hilo que la inflación se ubica por arriba del objetivo de Banco de México (Banxico) de 3 por ciento +/-1 punto porcentual.
Si bien los precios siguieron en aumento, el dato de abril significó una sorpresa para el mercado que, dada la coyuntura actual, esperaba una tasa de. 7.72 por ciento.
La inflación subyacente, que excluye los precios más volátiles y sirve para observar la tendencia de largo plazo, se incrementó 0.78 por ciento respecto al mes anterior y alcanzó una tasa de 7.22 por ciento anual.
La inflación no subyacente, que incluye precios de productos agropecuarios, energéticos y tarifas establecidas por el gobierno, retrocedió 0.14 por ciento mensual. Con lo cual alcanzó un crecimiento de 9.07 por ciento anual.
Entre los productos que tuvieron mayor incidencia en el incremento de los precios están el jitomate (20.3 por ciento), la gasolina (1.36 por ciento), el pollo (2.94 por ciento), el aguacate (13.94 por ciento) y la tortilla de maíz (2.18 por ciento).
En contraparte, la electricidad tuvo una disminución en sus precios de 12.31 por ciento, gracias al programa de tarifas eléctricas de temporada cálida que beneficia a algunas ciudades de México.
El limón, la cebolla y los plátanos también tuvieron disminuciones de 29.01 por ciento, 19.15 por ciento y 11.03 por ciento, respectivamente.