La Secretaría de Salud llevó a cabo la reinstalación oficial del Consejo Nacional para la Prevención y Tratamiento del Cáncer en la Infancia y la Adolescencia (Conacia), con el objetivo de mejorar los diagnósticos y tratamientos de este padecimiento en los más jóvenes. La reinstalación del consejo es un paso significativo hacia el fortalecimiento de la atención médica especializada para este grupo poblacional vulnerable. 

El consejo está encabezado por el secretario de Salud, David Kershenobich Stalnikowitz, quien preside el organismo. El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Ramiro López Elizalde, ocupa el cargo de vicepresidente. Además, el Conacia cuenta con la participación de directores generales de instituciones como el IMSS y Pemex, así como representantes de las secretarías de Educación Pública, Defensa Nacional, y Marina Armada de México. 

Entre los miembros también se incluyen institutos nacionales de salud, organizaciones ciudadanas, fundaciones y expertos en oncología, así como instituciones internacionales como la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). 

Durante el evento, el subsecretario López Elizalde enfatizó la importancia de proteger la salud de las niñas, niños y jóvenes en México, mencionando que este objetivo es una prioridad en la administración de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo. “El cáncer en estas edades no solo es una enfermedad física, sino un desafío emocional y psicológico que afecta a familias enteras”, subrayó. 

El subsecretario también destacó que los avances en la medicina han permitido un aumento significativo en la tasa de supervivencia de los pacientes con cáncer infantil en las últimas décadas. “Actualmente, los tipos de cáncer más comunes en México son la leucemia, el cáncer cerebral, los linfomas y los tumores sólidos”, explicó. 

Aunque el cáncer no es una enfermedad prevenible, el Conacia tiene como meta combatirlo mediante diagnósticos más tempranos, lo que es crucial para mejorar las posibilidades de tratamiento y recuperación. “El diagnóstico a tiempo es crucial para salvar vidas y mejorar la calidad de vida de nuestros jóvenes”, afirmó. 

Tras la intervención del subsecretario, se abrió un espacio de diálogo entre los organismos y especialistas presentes. Se discutieron diferentes perspectivas sobre el tratamiento del cáncer infantil y juvenil, así como la disposición de todos los participantes para trabajar bajo la coordinación de la Secretaría de Salud.