Por Víctor Barrera 

El tribunal electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) tendrá que resolver el problema que se está creando sobre la conformación del Poder Legislativo a partir del próximo 1 de septiembre, para evitar que se violente el espíritu de nuestra Carta Magna en su artículo 54 y el desarrollo de la democracia 

Lamentablemente, el problema se originó desde que, quienes están encargado de hacer, modificar o reformas las leyes no han establecido de manera clara la forma y los limites como se puede conformar el Congreso de la Unión. Esto para cuidar que ningún partido político pueda detentar un poder sobre los otros y con ello vulnerar los derechos políticos y humanos de quienes militan o simpatizan con esos partidos políticos. Esto es, que, ante el poder de un solo partido, y en este caso una coalición, que se invisibilice a una buena parte de ciudadanos quienes no serán tomados en cuenta en sus opiniones para resolver los problemas existentes en el país. 

Es cierto que el no establecer claramente estos límites, beneficio en años anteriores a quienes detentaron el poder. Pero ahora quien detenta el poder se ha olvidado que durante varios años combatió esa sobre representación que ahora sus “serviles” legisladores quieren imponer, solo para mantenerse en el cobijo de su líder, aun cuando este no los vea o los conozca de manera amplia. 

Pero esto muestra el verdadero talante de ese “jefe” que se mueve más por el odio y la venganza que por buscar el beneficio de la gente. Que su principal objetivo es retener el poder, que por muchos años se le negó para poder destruir poco a poco a esos partidos políticos y grupos de organizaciones y personas que le impusieron el slogan de “ser un peligro para México”. 

Sin embargo y aun cuando existe en Morena gente como Olga Sánchez Cordero, quien cuando fue magistrada, apoyo la propuesta del tabasqueño para para lograr en 1996 la modificación al artículo 54, y establecer que la equidad en el principio de representación y mantener la pluralidad política en el país. 

Por tanto, esto dejo jurisprudencia y esta deberá ser atendida por el TEPJF para su resolución, y con ello la invisibilidad de una parte de los mexicanos que desde hace casi seis años la han padecido. 

Entonces si la Constitución estipula que ningún partido político y en este caso se deberá interpretar coalición, no puede superar el 8 por ciento del porcentaje que alcanzo en las urnas, esto para evitar una sobre representación. Esto con la simple lógica de evitar que las minorías puedan ver vulnerados sus derechos. 

Para los próximos legisladores, quedará entonces la tarea de analizar una reforma a la política electoral para establecer los límites y reglas claras en torno a la representación, y posiblemente impedir o establecer también las reglas claras sobre las coaliciones.