Por Víctor Barrera

El próximo domingo se llevará a cabo el  segundo debate presidencial y en este se tocara el tema económico algo que lamentablemente no tiene resultados positivos para este régimen, que prometió mucho y que al final no entrego ni un resultado positivo para la economía familiar de los mexicanos, en especial para aquellos que están dentro de los deshiles de la pobreza.

Esto a pesar de que en este régimen se incremento no solo la cantidad de recursos que se entrega a la gente en programas sociales, sino que se crearon otros tantos que simplemente son paliativos y no apoyan en el crecimiento económico de las familias mexicanas.

Estos programas han ocupado un porcentaje importante en el presupuesto anual del país, sin embargo este gobierno no hizo absolutamente nada para incrementar la creación de riqueza a través de los sectores productivos, simplemente se  redujeron sus presupuestos para cubrir el costo de los programas sociales.

Esto ha dejado como resultado que cada vez sea más difícil que estos programas sociales sean sostenibles, si no existen riqueza en el país y se esta terminado con repartir pobreza.

Por tanto si la candidata del “oficialismo” pretende seguir bajo el guión de la continuidad, y defender los nulos resultados en materia económica de este gobierno o achacárselos a las administraciones anteriores, como lo hace su “jefe”,  solo mostrará que la continuidad no es el camino que debe seguir el país.

Esta falta de creación de riqueza ha derivado en otros problemas que son perceptibles en la economía familiar, como el incremento de los precios de los productos de la canasta básico, porque  cada vez se va diluyendo la cantidad de productos que compra con el apoyo de estos programas sociales.

También  ha  provocado que millones de  personas se incorporen a la informalidad abriendo con ello el boquete  en la recaudación fiscal del estado. Provocando también un panorama de inseguridad publica.

Sin embargo este régimen se ha avocado más a sanar las finanzas de  Pemex y CFE, en una opacidad, que permite sea un “caldo de cultivo” de la corrupción. Pero además  también quitando recursos presupuestales para otros sectores de desarrollo y alentando la perdida de grado de inversión de nuestro país ante  los inversionistas.

En fin, si claudia Sheinbaum pretende  la continuidad a pie puntillas, será difícil que millones de mexicanos voten por ella, porque  la economía y finazas públicas están sostenidas por alfileres, aunque se pretenda engañar   a la gente diciendo que vamos bien, requetebién