Por Víctor Barrera

Sin duda que el tema de la inseguridad es uno que  los mexicanos  más resienten, porque representa tener una vida  con miedo y en lo económico el ahuyentar las inversiones  privadas, nacionales e internacionales.

En este proceso  de elecciones, las organizaciones criminales empiezan a  hacerse presentes a través del homicidio de candidatos, funcionarios de partidos políticos o personas cercanas  con los políticos locales. Casos como el de Zacatecas, donde  parientes de los Monreal  han sido asesinados, es una muestra que ya no quieren a la familia Monreal, que durante años  ha utilizado este estado  como propio. En Michoacán donde las autoridades locales y el gobierno federal siguen sin acertar un verdadero  golpe a estas organizaciones para que salgan del estado, solo es una muestra clara que la ley es la que aplican estas organizaciones y no el gobierno estatal o el federal.

En Guerrero, la ausencia total de gobierno municipales y  estatal, que están mas dedicados a venerar al inquilino de Palacio Nacional que realizar su trabajo para quienes los eligieron,  sumado a desastres naturales, mantiene a este estado entre los que cuentan con mayor número de pobres.

En Sinaloa, si no existe alguna declaración del gobernador para desmentir los dichos, el crimen organizado es quien  pone y dispone de este cargo, a través de una persona que obedezca sus órdenes.

Sonora es otro estado donde el crimen organizado  ha empezado a establecerse por encima de los grupos políticos, lo mismo es Tamaulipas, Morelos, Durango, Chihuahua, Guanajuato, Baja California y Quintana Roo.

En menor medida se encuentra la CDMX, Veracruz, Colima

Y esto con firma que, una tercera parte del país,  la presencia del crimen organizado esta por encima de las leyes y gobierno federal y estatal.

Es cierto que las candidatas presidenciales han esbozado ya su propuesta para acabar con la inseguridad, la del partido en el gobierno, ha prometido continuar con la política que hasta ahora se ha  aplicado, la cual ha demostrado que  es un fracaso.

La candidata de la oposición,  habla sobre  rescatar los territorios desde los municipios, para poco a poco  regresar la paz y tranquilidad al país,  y ha puesto una fecha, cuatro años.

Sin embargo a la gente le urge volver a sentirse libre de caminar por las calles y os caminos de México, a cualquier hora, sin miedo. A los inversionistas  les urge que exista seguridad pública para evitar los robos que dañan sus finanzas y que se refleja en menor producción y cierres de fuentes de empleos.

A los comerciantes, formales e informales les urge que  ya no pase la gente a pedir el derecho de piso, algo que merma su desarrollo.

En fin, México esta siendo rehén de las organizaciones criminales y  de no encontrar una solución pronta, el crimen organizado seguirá imponiendo a sus empleados en puestos públicos y  lo peor es que estos  empleados, seguirán vendiendo a los mexicanos a cambio de algunos millones de pesos, y al pedir cuentas por parte de la población solo responderá, solo soy el alcalde, el gobernador o el presidente según sea el caso.