Por Víctor Barrera
Son las palabras que escuchan la mayoría de las amas de casa o personas que realizan diariamente la compra del los víveres que una familia podrá degustar.
Estas personas, que compran los alimentos, hacen todos los días cálculos para que el ingreso familiar sirva para comprar productos de una canasta básica cada día mas alejada de esos ingresos.
Pero además deberán guardar un poco de dinero para comprar algunas otras cosas útiles para el hogar, por lo que las familias mexicanas ven cada día como sus ingresos son más pequeños ante el incremento del precio de todos los productos.
Hoy, por la mañana, el inquilino de Palacio Nacional, manifestaba que en su gobierno se ha incrementado considerablemente el nivel del salario mínimo, y que este paso de 88 pesos diarios en el 2018 a 249 pesos en 2024. Esto podría ser significativo, si existieran las condiciones adecuadas para poder disfrutar ese dinero más allá de solo los alimentos y lo más básico para una persona.
Por que si comparamos el salario mínimo, con el precio de cada producto, este salario sigue siendo insuficiente para siquiera alimentar a una pequeña familia de tres integrantes.
Y es que, a pesar de presentarse una disminución en el nivel de inflación, este se ubica en términos anuales en 4.3 por ciento en octubre de este año, cada uno de los precios de los alimentos ha aumentado, en su mayoría por encima de 30 por ciento, lo que en simple matemática, es muy superior al 20 por ciento de incremento salarial.
Pero la amenaza de “va a costar más” que escuchan las amas de casa, sigue latente, porque ante el incremento en el salario mínimo, habrá un reacomodo en los otros salarios y esto impactará precisamente las finanzas de las empresas y esto obligara a una revisión de su nómina.
Es por ello que este rubro, el salarial, será otro tema pendiente para la próxima administración federal.
Es cierto que se escucha excelente decir que se han incrementado los salarios, pero cuando no se produce riqueza y la economía no entra en su círculo virtuoso, los salarios seguirán siendo reprimidos y raquíticos para alcanzar una mejor calidad de vida de los pobladores en el país.
Recordemos que si no hay creación de riqueza, la que hasta ahora tenemos solo seguirá limitándose y los beneficios seguirán aplazándose.