Por Víctor Barrera
Con el inicio de las precampañas, también se aplicaran las modificaciones que el arbitro Electoral, INE, realizo para que estas verdaderamente sean de importancia y crecimiento político para el país.
Primero se determino el limite de dinero que podrán utilizar las y el candidato, que son 85 millones de pesos, pero esta vez serán fiscalizados de manera casi simultanea para evitar que algunas campañas sobre pasen el limite.
Además se estableció de manera clara la utilización de los espacios de radio y televisión, publica y privada, que el INE asigna a cada partido político. Esto se otorgara de acuerdo al porcentaje de cada partido polito, Morena, PT y PVEM que formaron una alianza tendrá por supuesto mayor tiempo para su candidata. Mientras que la coalición formada por PAN, PRI, y PRD, tendrán menos tiempo y serán los institutos políticos quienes decidirán que tiempo le ceden a su candidata, Para MC, el porcentaje es menor.
Estas dos modificaciones abonan en cuanto a la equidad que se pretende tengan las y el candidato, para que sean conocidos aun más por la gente, porque para recorrer todo el país es necesario mas de un año y las campañas políticas junto con la precampañas suman un periodo de medio año, si a esto sumamos los tiempos utilizados en sus comicios internos, de hoy en adelante, los aspirantes y candidatos podrán disfrutar de un tiempo importante para darse a conocer.
Pero el tercer cambio, que es el más importante, corresponde a eliminación de restricción sobre los temas que deberán tocarse en la precampañas. Por tanto existirá la libertad para que las candidatas y el candidato, puedan tocar ya temas que pueden estar dentro de sus campañas políticas, es decir sobre su plan de gobierno.
Esto permitirá entonces conocer más esas propuestas y por supuesto será una herramienta importante para la ciudadanía para analizar a cada candidata o candidato y no solo votar por el nivel de popularidad o carisma que tenga sobre la gente.
Además obligará a quien quiera sumir el puesto público más importante del país, a asumir una campaña con veracidad sobre sus aptitudes para dar soluciones a los problemas que siguen aquejando a México y sus pobladores.
Ya no solamente nos quedaremos en precampañas y campañas con slogan como “la continuidad” o “el cambio”, porque tendrán que demostrar que significan, a través de propuestas reales y no ocurrencias, que en primera instancia podrían parecer disruptivas, pero que terminan siendo simples palabras.
Es cierto que llevamos ya varios meses en campañas políticas disfrazas, y con tanta basura electoral, como panfletos, flyers, bardas pintadas y otros elementos que tienen la falta del peso de contenidos para saber que harán para solucionar los problemas.
Pero ahora con estos cambios podremos esperar cambios significativos que mejoraran las contienda para ofrecer conocimiento de la personas, sus capacidades y aptitudes reales para analizar y elegir a la mejor o el mejor para que ocupe el Poder Ejecutivo.