Por Víctor Barrera
Sin duda esta administración federal, terminará su sexenio aportando más “ocurrencias” con el objetivo de tratar de enderezar lo que lamentablemente destruyó.
El ejemplo más claro de esto es la presentación en esta semana del Acuerdo de Federalizacion de Servicios de Salud, que vendrá a sustituir al Seguro Popular que durante años otorgo este servicio a 53 millones de mexicanos, que no contaban con cobertura institucional del IMSS, ISSSTE, Institutos de salud estatales o de las Fuerzas Armadas.
Este Seguro Popular que en el 2019 fue sustituido por el Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que en tan solo dos años en operaciones demostró su inoperancia aun cuando se le inyecto una gran cantidad de recursos públicos.
Con el impacto de la pandemia, “algo que cayó como anillo al dedo”, en palabras de Andrés Manuel López Obrador, la inoperancia del Insabi se extendió a todo el sistema de salud, originando un desabasto de medicamentos ante la “necesidad” de aplicar recursos para la compra de vacunas y el financiamiento de crear una vacuna mexicana en contra del llamado covid-19.
Esto dejo en claro que el sistema de salud del país era frágil, invadido por una corrupción que durante años solo logro hacer ricos a quienes por fortuna fueron aceptados como proveedores de medicamentos dejando afuera a muchos laboratorios farmacéuticos que también proveían en años anteriores al sistema de salud.
También alimento el crecimiento de consultorios de farmacias, que por una módica cantidad ofrecían sus servicios, pero la ganancia era en la venta de sus propios productos farmacéuticos, provocando también el incremento del gasto de las familias para la compra de los mismos.
De acuerdo con cifras del Inegi con información del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), el incremento en la compra de medicamentos se elevo hasta en un 40 por ciento del 2019 a la fecha, factor de impacto importante en la economía familiar.
En conclusión Andrés Manuel López Obrador solo vino a destruir un Sistema de Salud que permitía a la gente recibir medicamento para menguar sus enfermedades y no impactaba en sus bolsillos.
Aunque se trate de manifestar que el Acuerdo de Federalizacion de Servicios de Salud es una importante decisión, solamente representa instaurar el Seguro Popular, pero ahora con la variante que los servicios de Salud, nuevamente serán administrados desde el centro quitándole a los estados esta obligación, principalmente en 23 estados que son gobernados por Morena o partidos aliados.
Andrés Manuel vuelve a mentir a la gente al engañarla manifestando que centralizar los servicios de salud será mejor. Pero la historia nos muestra que la centralización hace mas daño, porque serán las autoridades federales quienes designaran presupuestos y medicamentos hacia los estados y esto podría provocar nuevamente una atención precaria en los hospitales estatales y no se diga en los consultorios municipales sumado a la falta de medicamentos, derivado de una ocurrencia más