El gobierno mexicano decidió aplicar un arancel de 50 por ciento sobre las importaciones de maíz blanco, al dar por concluida una exención de seis meses que aplicó a principios de año como medida para combatir el incremento de precios.
El maíz blanco fue uno de los alimentos de la canasta básica que quedaron exentos de gravámenes en un decreto publicado el 6 de enero, en un intento del gobierno de controlar la inflación en el país. Sin embargo, el gobierno dijo que la exención del arancel de importación al “maíz blanco harinero no ha generado un impacto significativo en la disminución de precios en el mercado nacional, por lo que se considera pertinente eliminarla”. Así se explicó en un decreto publicado el viernes por la noche en el Diario Oficial de la Federación
México produjo casi 23 millones de toneladas de maíz blanco el año pasado e importó sólo 614 mil toneladas, según datos de la Secretaría de Agricultura.
El arancel de importación de 50 por ciento estará vigente hasta el 31 de diciembre, de acuerdo con lo establecido en el decreto.
México importa poco maíz blanco, que se usa para consumo humano, principalmente de Estados Unidos y de Sudáfrica.
La exención de otros derechos de importación sigue vigente, mientras que la inflación general comienza a enfriarse.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía informó en la semana que la inflación general anual se ubicó en la primera quincena de mayo en 5.84 por ciento.