El Consejo Nacional para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), advirtió que la tasa de fecundidad adolescente en México para 2022 se ubica entre los niveles más altos de America Latina y el Caribe entre adolescentes entre 15 y 19 años.
El Coneval realizó el estudio exploratorio “El Embarazo en la adolescencia y el acceso a educación y servicios de salud sexual y reproductiva”, el cual tiene el objetivo de visibilizar esta problemática y observar el impacto que la contingencia sanitaria tuvo al respecto, así como generar información que contribuya al diseño de programas y acciones que resuelvan las problemáticas del embarazo de este grupo de población.
En 2020, de acuerdo a este estudio, a nivel estatal, la tasa específica de fecundidad adolescente (TEFA) entre 15 y 19 años tuvo su valor máximo en Coahuila con 94 nacimientos por cada mil mujeres de este grupo de edad, seguido de Chiapas con 85 nacimientos, Nayarit y Campeche con 79 nacimientos.
En contraste, Ciudad de México presentó los valores mínimos con 48 nacimientos por cada mil mujeres de entre 15 y 19 años, seguido de Querétaro con 60 nacimientos por cada mil adolescentes.
El embarazo adolescente podría constituir una vulneración de los derechos humanos de niñas y adolescentes, en particular, su derecho a vivir una juventud libre de violencia, así como a contar con servicios de educación y de salud sexual y reproductiva. Si bien en México se han observado avances en el acceso a dichos servicios, la brecha pudo haberse ampliado con la pandemia de SARS-CoV-2.
En 2020, ocho de cada diez mujeres, de entre 12 y 19 años que han tenido al menos un hijo, presenta rezago educativo, mientras que, solo dos de cada diez mujeres que no han tenido hijos, presentan esta problemática.
Existe desconocimiento de las y los adolescentes sobre la posibilidad de acceder a los servicios de salud sexual y reproductiva, lo cual plantea el reto de buscar mecanismos para acercar a este grupo de población a los servicios de salud sexual y reproductiva que ofrece el sector salud, concluyó el Coneval.