El ataque armado registrado en avenida Topacio, en la colonia Santa Eduwiges, en los límites entre Guadalajara y Zapopan, que dejó tres personas asesinadas “se trató de una agresión directa contra un empresario del Mercado de Abastos, en la que participaron más de 30 personas con armas largas y al menos siete vehículos”, informó el Gobierno de Jalisco.
Las víctimas mortales fueron el empresario bodeguero Alberto Prieto Valencia, su hija de 16 años y uno de sus escoltas; además, cuatro escoltas resultaron heridos de bala, uno de ellos de gravedad.
La víctima viajaba escoltada por siete hombres de perfil militar. La Fiscalía del Estado confirmó que los escoltas eran exintegrantes de fuerzas especiales y que repelieron la agresión durante aproximadamente 15 minutos, pese a la superioridad numérica del comando. El propio gobierno estatal detalló que “el vehículo de la víctima era resguardado por al menos siete escoltas, algunos de ellos militares en retiro, quienes intentaron repeler la agresión”.
Tras los hechos, se realizó una reunión extraordinaria de la Mesa de Seguridad del Estado, con la participación de autoridades de los tres niveles de gobierno, en las instalaciones de la Quinta Región Militar. En paralelo, se intensificaron los peritajes en la escena del crimen, ubicada en el cruce de avenida Topacio y calle Brillante, donde fueron asegurados más de 200 casquillos percutidos de calibres de alto poder.
Por las características del ataque —el número de agresores, el uso de armas largas y las tácticas de bloqueo para retrasar la respuesta policial—, las autoridades estatales señalaron que “por las características del suceso se presume que se trató de un crimen perpetrado por la delincuencia organizada”, aunque subrayaron que el móvil se definirá conforme avancen las investigaciones.
Fuentes que revisan el caso revelaron que los atacantes utilizaron tácticas de bloqueo en calles aledañas para retrasar la respuesta policial, y que los vehículos involucrados portaban placas clonadas del estado de Michoacán.
Actualmente, el escolta que resultó gravemente herido ha mostrado una leve mejoría y se encuentra bajo custodia permanente en un hospital de Zapopan, donde ya ha aportado su primera declaración ministerial, pieza clave para identificar a los ejecutores.
Si bien inicialmente el secretario General de Gobierno, Salvador Zamora, vinculó a la víctima con presuntas «rifas colombianas», se abrió una línea de investigación hacia el sector empresarial. La Unidad de Inteligencia Financiera estatal investiga ahora si el móvil fue una represalia por la negativa al pago de «derecho de piso». Prieto Valencia era propietario de una importante operadora logística de transporte de carga, un sector que ha reportado un incremento en amenazas de extorsión durante el último semestre.
En la zona donde fue el tiroteo se reportan al menos 10 casas y más de dos vehículos con daños por impactos de bala, una de las viviendas tiene más de 50 balazos en la fachada.
En el Mercado de Abastos, que estas fechas es una zona muy concurrida por las compras de alimentos e insumos para las fiestas de fin de año, la seguridad continúa con un puesto fijo a cargo de la Comisaría de Guadalajara y patrullajes de la Guardia Nacional. No obstante, el temor persiste entre locatarios y vecinos de las colonias Santa Eduwiges y Residencial Victoria, quienes quedaron atrapados en el fuego cruzado en la balacera ocurrida este lunes.
