El Gobierno de México anunció la suspensión de operaciones de 13 casinos físicos y virtuales por presuntas operaciones de lavado de dinero y evasión fiscal, detectadas mediante una investigación conjunta entre la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), el Gabinete de Seguridad y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), con el apoyo de agencias internacionales como el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.

Durante la conferencia de prensa matutina de la presidenta Claudia Sheinbaum, el titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, informó que los establecimientos operaban en los estados de Jalisco, Nuevo León, Sinaloa, Sonora, Baja California, Estado de México, Chiapas y la Ciudad de México, y que mantenían flujos financieros hacia países como Rumania, Suiza, Malta y Emiratos Árabes Unidos.

“Este trabajo sistemático permitió detectar irregularidades fiscales, operaciones inusuales y vínculos financieros transnacionales que afectaban la integridad del sistema financiero”, explicó García Harfuch.

Según el secretario, la investigación reveló patrones complejos de simulación fiscal y dispersión de recursos, mediante los cuales los casinos reportaban operaciones en efectivo y declaraciones en ceros, mientras enviaban montos millonarios al extranjero a través de plataformas no supervisadas.Entre las medidas adoptadas se incluyen la suspensión inmediata de actividades, el bloqueo de páginas electrónicas y cuentas bancarias vinculadas, así como la presentación de denuncias ante la Fiscalía General de la República (FGR) por presuntas operaciones con recursos de procedencia ilícita.

“Se usaban sus cuentas o tarjetas prepagadas para hacer apuestas con dinero de procedencia desconocida. Los sistemas registraban supuestas ganancias millonarias que en realidad eran transferidas de inmediato al extranjero”, detalló Galeano.

Añadió que los recursos eran enviados a paraísos fiscales y posteriormente reintegrados a México bajo apariencia de ganancias legales o ingresos empresariales, en un ciclo repetido miles de veces.

“Cada operación parecía normal, pero en conjunto formaban un mecanismo sistemático para burlar la ley y lavar dinero”, afirmó.

La presidenta Claudia Sheinbaum destacó que la estrategia de seguridad de su gobierno incluye seguir el flujo financiero vinculado con grupos criminales, reforzando la coordinación entre la UIF, el Sistema Nacional de Inteligencia y sus contrapartes internacionales.

Sheinbaum Paro aclaró que por razones legales no pueden revelarse los nombres de los casinos ni de las empresas involucradas, pues las investigaciones siguen en curso. No obstante, adelantó que autoridades federales trabajan en una reforma legal para actualizar la regulación de los casinos digitales, un sector que ha crecido sin supervisión suficiente.

“Hoy existen muchísimos casinos digitales que operan en redes sociales y plataformas. La normatividad tiene que actualizarse, porque cuando se hizo la ley no existían de la manera en que existen hoy, y eso abre la puerta al lavado de dinero”, sostuvo la presidenta.