Con el objetivo de fortalecer la atención integral a las personas adultas mayores, la diputada federal Socorro Jasso Nieto presentó una iniciativa para modificar la Ley General de Salud, proponiendo la implementación de un programa nacional para la creación de centros geriátricos públicos, en coordinación con los gobiernos estatales y municipales.

La propuesta contempla que dichos centros garanticen atención médica especializada en geriatría, personal de enfermería capacitado, servicios psicológicos para el cuidado emocional, rehabilitación física para promover la autonomía, y actividades de desarrollo social que fomenten la inclusión, la convivencia y la participación activa.

Asimismo, la legisladora subrayó la necesidad de establecer un sistema de supervisión gubernamental permanente, encargado de verificar que tanto los centros públicos como privados cumplan con estándares de calidad y respeto a los derechos humanos.

“La insuficiencia en la atención geriátrica no puede resolverse con esfuerzos aislados. Se requiere una estrategia nacional articulada dentro del Sistema Nacional de Salud”, afirmó.

Jasso Nieto también propuso que se establezca explícitamente la obligación del Estado de garantizar atención integral y especializada a las personas mayores, mediante programas, unidades médicas y profesionales con formación en geriatría y gerontología.

Entre los mecanismos regulatorios planteados, destaca la creación de un Permiso Sanitario de Atención Geriátrica y una certificación obligatoria renovable cada cinco años, que avale el cumplimiento de estándares en infraestructura, protocolos de atención, capacitación del personal y coordinación interinstitucional.

Además, la iniciativa contempla la conformación de un Registro Nacional de Prestadores Privados de Servicios Geriátricos, que permita dar seguimiento y supervisión continua a las instituciones autorizadas, estableciendo sanciones en caso de incumplimiento.

“Con ello, se busca cerrar la brecha de desigualdad entre quienes pueden pagar atención privada y quienes dependen exclusivamente del sistema público”, señaló.

Como parte de los elementos innovadores, la congresista del PRI propuso que aseguradoras y prestadores privados estén obligados a incluir en sus planes al menos una modalidad de atención geriátrica integral, que garantice consultas preventivas, manejo de enfermedades crónico-degenerativas y servicios de rehabilitación.

También se prevé que la Secretaría de Salud desarrolle mecanismos de coordinación con instituciones privadas, a fin de que las personas mayores en situación de vulnerabilidad puedan acceder a estos servicios mediante subsidios, convenios o esquemas de colaboración público-privada.

“Esta reforma permitiría avanzar hacia un sistema robusto de atención geriátrica integral y supervisada, que reconozca la dignidad y los derechos de las personas mayores, y garantice su inclusión plena en la vida social, económica y cultural del país”, concluyó.

La diputada Socorro Jasso recordó que el envejecimiento poblacional representa uno de los mayores desafíos para la política social y de salud pública. De acuerdo con el INEGI, al segundo trimestre de 2022 residían en México 17.9 millones de personas de 60 años o más, equivalentes al 14 por ciento de la población total. Por su parte, el INAPAM estima que para 2030 esta cifra ascenderá a 20.6 millones, 15 por ciento, y para 2050 alcanzará los 35.4 millones, 24 por ciento.

Agregó que México solo cuenta con alrededor de 841 médicos geriatras certificados.