El lunes 25 de agosto, Yesenia Lili, egresada de la Escuela Normal Urbana Federal de Cuautla, encabezó junto con integrantes de su comunidad un bloqueo en la autopista Siglo XXI. Denunció haber sido excluida del Proceso de Admisión en Educación Básica 2025-2026, pese a haber obtenido el primer lugar en la convocatoria.  

Asegura que la decisión obedece a actos de discriminación por su condición de mujer y por pertenecer a una comunidad indígena. 

La manifestación fue respaldada por habitantes de Amilcingo, una comunidad indígena perteneciente al municipio de Temoac, quienes desplegaron lonas en las que responsabilizaron a la gobernadora Margarita González Saravia, al director del Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM), Leandro Vique, y a Oswaldo Rachner, subdirector del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (SICAMM). El bloqueo estuvo acompañado de la quema de llantas como medida de presión. 

Yesenia explicó que participó en la convocatoria estatal, en la que compitieron 129 aspirantes. Obtuvo un promedio de 94.15, lo que la colocó en el primer lugar de prelación, con derecho a elegir entre dos plazas definitivas —en Cuautla y Zacatepec—, además de concursar por 19 interinatos. 

El 18 de agosto, en el Acto Público de Asignación de Plazas celebrado en las oficinas del IEBEM, seleccionó la plaza en Cuautla, firmó el acta de asignación y entregó la documentación requerida.  

No obstante, dos días después, asegura, de manera verbal le notificaron que su prelación había sido “impugnada” y que quedaba fuera del proceso, sin recibir oficio alguno que sustentara la decisión. 

Ante la falta de respuesta oficial, presentó una queja ante la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos e inició acciones legales. Responsabilizó directamente al director del IEBEM y solicitó la intervención de la mandataria estatal. 

“Fue un orgullo para mi familia y para mi comunidad indígena haber obtenido el primer lugar, pero me siento discriminada y desplazada sin razón”, señaló. 

A través de un comunicado, el IEBEM precisó que el proceso de admisión docente se encuentra sujeto a la normativa federal y no a determinaciones locales. Indicó que, tras la revisión de expedientes derivada de impugnaciones, se detectaron inconsistencias en la acreditación de experiencia laboral, ya que esta solo es válida si se realiza con posterioridad a la titulación profesional. 

La autoridad subrayó que está obligada a apegarse a los criterios de la Secretaría de Educación Pública (SEP) y de la Unidad del Sistema para la Carrera de las Maestras y los Maestros (USICAMM), por lo que no tiene atribuciones para modificar los resultados. 

En respuesta, Yesenia difundió un video desde la autopista, en el que reconoció que aún no cuenta con su título profesional, aunque subrayó que corresponde a la autoridad educativa expedirlo.  

Recordó además que existe un acuerdo emitido durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador que otorga un plazo de seis meses a los egresados de normales y CAM para la entrega del documento. 

Jorge Velázquez, profesor y activista comunitario de Amilcingo, puntualizó: “El problema no es la falta del título, sino los posibles actos de corrupción detrás de este repentino rechazo a reconocer el proceso que ganó la maestra Yesenia”. 

Docentes de la región oriente denunciaron presuntas prácticas irregulares dentro del IEBEM, entre ellas la venta de constancias de antigüedad, las cuales atribuyen a Alejandro Vique, supervisor de secundarias en la zona sur y hermano del director del instituto.  

Según relataron, este tipo de documentos se expiden con sello y firma oficiales, pero son comercializados, lo que ha distorsionado los procesos de ingreso al magisterio. 

Asimismo, señalaron que la plaza asignada a Yesenia habría sido destinada a una persona cercana al director del IEBEM, lo que, afirmaron, evidencia favoritismo y nepotismo en la institución.  

“Existen visos de corrupción que afectan diversos procesos de admisión docente en el estado”, advirtió una maestra de la región. 

Esta periodista buscó directamente, vía telefónica y por WhatsApp, al director del IEBEM, Leandro Vique, para conocer su postura sobre los señalamientos de presunta corrupción; sin embargo, no hubo respuesta.  

También se solicitó la versión institucional, a través del área de Comunicación Social, pero la petición fue ignorada. Hasta el cierre de esta edición no hubo pronunciamiento. 

Tras varias horas de protesta, el bloqueo fue levantado y se instaló una mesa de trabajo en Palacio de Gobierno con autoridades educativas, para dar seguimiento al caso.