En el segundo trimestre del año se reportó una creación de empleo de 113,599 puestos de trabajo con respecto al mismo periodo del año pasado. Esta es la cifra más baja en una década para un trimestre abril-junio y sin contar los efectos de pandemia en el mercado laboral, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).

Hasta ahora, el crecimiento anual de empleo más bajo para un periodo abril-junio era el del 2014, cuando se generaron sólo 23,880 plazas, desde entonces el aumento de la ocupación era por arriba de los 900,000 puestos.

Por otra parte, la tasa de desocupación (2.7%) se mantuvo sin cambios entre el segundo trimestre del 2025 y 2024. En términos porcentuales, el desempleo se ha mantenido estable desde hace dos años.

A decir de Gabriela Siller, directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, si bien la desocupación permanece baja, los resultados del segundo trimestre confirman un mal desempeño del mercado laboral en el primer semestre del año.

“En la primera mitad del año se observa un deterioro del mercado laboral, pues la población ocupada disminuyó en 46,786 personas respecto al cuarto trimestre del 2024, siendo el segundo año consecutivo que se observa una contracción de la población ocupada en la primera mitad del año, pues en 2024 se observó una disminución de la población ocupada de 76,786 personas en el mismo periodo de tiempo. Anteriormente, no se observaba una disminución de la población ocupada en el primer semestre de un año desde 2020”, indica la especialista.

En el último año, la tasa de informalidad laboral pasó de 54.3% a 54.8% de la población ocupada, alcanzó su nivel más alto desde el cuarto trimestre del 2023.

La subocupación, otro indicador clave del mercado laboral, tuvo una ligera baja de 0.2 puntos porcentuales con respecto al mismo trimestre del año pasado, con esto se ubicó en un nivel de 7.2% e hiló dos trimestres con reducción.

En el panorama anual, el trabajo subordinado sumó a poco más de 680,000 personas con acceso a prestaciones, un crecimiento casi proporcional a la disminución de los empleados que carecen de beneficios. También se observó una reducción de 644,000 trabajadores con jornadas laborales superiores a las 48 horas por semana.

Sin embargo, el acceso al empleo subordinado fue bajo. Entre el segundo trimestre del 2025 y el del 2024, sólo 59,320 personas se ocuparon en un trabajado asalariado.

En ese lapso, el renglón que más creció fue el de empleadores (+351,306). En el otro extremo, el trabajo por cuenta propia registró una caída de 141,432 ocupaciones y el trabajo no remunerado, una pérdida de 155,595 puestos.