Por Víctor Barrera

México se mantiene en una situación económica frágil, derivado de los cambios comerciales que Donald Trump está aplicando al mundo. Pero lo más lamentable es que aun cuando existen formas de evitar que el entorno sea más difícil para el país, la clase política parece empeñada a no aplicar las estrategias correctas.

Porque no se puede mirar a otro lado cuando los problemas persisten y se agrandan y hasta el momento la presente administración busca la manera de evitar los problemas y expresar que estos problemas solo son creados por la oposición para sacar beneficio.

Esta es la historia más conocida en el país, los gobiernos pasan de largo los problemas y solo quieren que les aplaudan los pequeños triunfos y para ello ocupan las estadísticas que pueden marcar esos pequeños triunfos ante las muchas adversidades sin resolver.

No quiero que se entienda que solo hablamos de problemas, sino de soluciones, y las soluciones se dan cuando precisamente detectamos los problemas.

Recientemente, Claudia Sheinbaum manifestó que nadie quiere reconocer que han salido de la pobreza en México un poco más de 13 millones de personas, pero lamentablemente es que esta aseveración queda demasiado rebasada si observamos que muchos mexicanos aun carecemos de servicios indispensables para una mejor calidad de vida, principalmente salud y educación.

Estas carencias, más los problemas que mantiene el país, hacen una realidad, que no quiere ver el gobierno, Donde más de la mitad de los mexicanos no pueden tiene una mejor calidad de vida. No todo es ingreso, porque es cierto que el ingreso se incrementó en los seis años pasados, pero ese ingreso no alcanza para comprar lo básico en alimentación, para obtener servicios de salud adecuados, para acceder a una educación que permita a la gente una movilidad social real, Así se hable de aumentos salariales del ciento por ciento, la pobreza real no se podrá erradicar.

No es con la búsqueda del aplauso como deben trabajar los gobiernos sino es resolviendo  problemas para evitar que estos se acentúen. Desde el inicio de los gobiernos de la llamada 4T se prometió acabar con la corrupción y esta sigue presente en los gobiernos. Se menciono que erradicarían los “viejos vicios” de los gobiernos que vivían a costa del erario público y esto aún se presenta. Se hablo de honestidad y falta mucho para que esto se haga realidad.

No es manifestando que los de “antes así lo hacían” para justificar sus actos, porque no se resuelven los problemas. La solución es evitar que esos vicos persistan.

En los próximos días iniciara un nuevo año para el poder  Legislativo, y Claudia Sheinbaum aun tiene la oportunidad de hacer los cambios suficientes para demostrar que ella no tolera ni tolerará actos que insinúen que la clase política sigue con los mismos vicos. Esto significará, posiblemente remover a sus coordinadores, parlamentarios y si no hace demostrará una vez más una debilidad para asumir un liderazgo y sobre todo debilidad para evitar que nadie salga de los objetivos en su plan de trabajo. 

Hasta ahora todo indica que nadie le hace caso y que cada funcionario y legislador de Morena puede hacer lo que le venga en gana, porque no será sancionado a nadie si no todo lo contrario, se le protege y este manto de impunidad es aprovechado por muchas personas.

La debilidad puede ser el peor defecto en n gobierno y esto lo hace perder el rumbo y es caldo de cultivo para la persistencia de vicios.