Los ministros de Economía de los países del G7 se reúnen en Canadá a partir del martes con Ucrania como invitado a la mesa, donde la guerra con Rusia monopolizará buena parte del encuentro, así como los aranceles aduaneros lanzados por Donald Trump.
Los jefes de las finanzas de Estados Unidos, Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Canadá se reúnen hasta el jueves en el Parque Nacional de Banff, en el oeste de Canadá.
Las sonrisas características de los miembros del G7 en la foto de familia corren el riesgo de amargarse por las divisiones generadas en el grupo tras el regreso de Trump a la Casa Blanca.
Trump agrietó a principios de abril los cimientos del grupo de potencias con el anuncio de aranceles generalizados a las importaciones. Desde entonces, el republicano ha suspendido temporalmente sus amenazas y ha alcanzado un acuerdo comercial con Reino Unido.
Pero inclusive con sus vaivenes, los aranceles son más altos que a finales de enero, cuando comenzó su segundo mandato. Esta política proteccionista del republicano ha disparado los temores a que el ritmo del crecimiento de la economía global se reduzca.
«Este será un G7 inusual», por los impuestos aduaneros, declaró a la AFP Ananya Kumar, investigadora del think-tank Atlantic Council.
Los socios del G7 tratan de convencer a Washington de que se olvide de los aranceles. Se espera que el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, acapare la atención de sus homólogos.
Bessent ayudó a desescalar recientemente la guerra arancelaría con China, con un acuerdo que redujo significativamente los gravámenes de tres cifras que Washington y Pekín se habían impuesto mutuamente.
«Ha demostrado que puede ser la figura razonable» del gobierno de Trump, apunta Carl Weinberg, economista jefe de la firma de análisis High Frequency Economics.
Según un portavoz de su departamento, Bessent abogará por que el G7 se «centre en resolver los desequilibrios (comerciales) y las prácticas desleales dentro y fuera» del grupo.
Una fuente cercana a la delegación estadounidense indicó que Washington espera una condena conjunta por el exceso de producción en China.
El ministro de Finanzas de Ucrania, Sergii Marchenko, estará presente en la reunión, así como los jefes de los bancos centrales del G7.
Ucrania aprovechará la invitación para tratar de convencer a Estados Unidos de que imponga nuevas sanciones a Rusia.