El mando del ejército sirio notificó a sus oficiales que el presidente Bashar al Assad fue derrocado ayer tras la ofensiva relámpago comandada por combatientes pro turcos encabezados por el grupo Hayat Tahrir al Sham (HTS), quienes anunciaron que capturaron Damasco, lo que marca el final del reinado de 50 años de su familia.

Assad partió en avión desde la capital con destino desconocido, informaron dos mandos castrenses a la agencia de noticias británica Reuters, mientras Rami Abdurrahman, del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, aseguró a la agencia estadunidense Ap que Al Assad abandonó el país.

Nuestras fuerzas comenzaron a entrar a la ciudad. El tirano Bashar al Assad ha huido; declaramos a Damasco libre, anunció el movimiento HTS. La entrada de los milicianos a la capital también fue confirmada por el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.

Al cierre de esta edición, la cadena catarí de noticias Al Jazeera reportó que se escucharon disparos en la capital y se presenció caos y tumultos en el aeropuerto de Damasco. Agregó que, según el parte de los combatientes, éstos tomaron el edificio de la Radio y Televisión Pública en el corazón de la capital. El líder de HTS, Abu Mohammad al Jolani, pidió a sus tropas que abandonen las instituciones estatales sin causar daños y afirmó que permanecerán por ahora bajo la supervisión del primer ministro sirio, Mohammed Ghazi Jalali.

Por su parte, Jalali aseguró en una declaración divulgada en video que el gobierno estaba dispuesto a extender su mano a la oposición y entregar sus funciones a un gobierno de transición.

El ritmo de los acontecimientos dejó atónitas a las capitales árabes, y surge el temor de una nueva ola de inestabilidad regional, reportó Reuters.

Tras el colapso del gobierno de Al Assad, informes sirios afirman que tanques israelíes cruzaron la frontera hacia Siria desde los Altos del Golán. Reportes no confirmados indican que las fuerzas de Tel Aviv avanzaron hacia la zona de amortiguación en el área de Quneitra y lanzaron bombardeos de artillería. Israel no hizo comentarios.

Por su parte, Hezbollah, retiró a sus fuerzas del entorno de Damasco ante la ofensiva contra su aliado Al Assad, sostuvo un informante cercano al grupo libanés a la agencia francesa de noticias Afp.

Fuentes de los combatientes reportaron a la agencia Europa Press bajo condición de anonimato que Al Assad ofreció a Estados Unidos la posibilidad de cortar toda relación con las milicias pro iraníes a cambio de que las potencias occidentales, con Washington a la cabeza, intervinieran para poner fin a la ofensiva de combatientes.

El líder de HTS, Abu Mohammed alGolani, de 42 años, lideró durante 12 años una filial de Al Qaeda en Siria, llamada Frente Nusra, pero se distanció de esa organización en un intento de ganarse a los gobiernos internacionales y a las minorías religiosas y étnicas del país al presentarse como un defensor del pluralismo y la tolerancia.

Washington etiquetó al nuevo grupo de organización terrorista. Además, estableció una recompensa de 10 millones de dólares por su líder.

Desde que los combatientes anunciaron esta semana la toma de la ciudad de Homs calificaron el hecho como una victoria histórica. La pérdida de dicha localidad fue un golpe devastador para Al Assad, ya que abría el camino hacia Damasco, recapturada por las tropas gubernamentales en 2018 tras un asedio de varios años.

Las fuerzas del presidente sirio, que cuentan con un importante respaldo militar de Rusia e Irán, nunca perdieron tantas ciudades en tan poco tiempo desde el estallido en 2011 de la guerra civil, que dejó más de 500 mil muertos.

La Casa Blanca publicó una breve declaración tras los hechos, y comunicó que el presidente Joe Biden y su equipo siguen de cerca los extraordinarios acontecimientos, mientras el asesor de seguridad nacional de Washington, Jake Sullivan, afirmó que Estados Unidos quiere garantizar que los combates en Siria no conduzcan a un resurgimiento de Estado Islámico o a una catástrofe humanitaria.

El canciller ruso, Serguei Lavrov, declaró que el territorio sirio no puede caer en manos de terroristas; en tanto que el enviado especial de Naciones Unidas para Siria, Geir Pedersen, llamó a realizar conversaciones urgentes en Ginebra para garantizar una transición política ordenada.