El titular de la Secretaría de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, compareció ante el Pleno de la Cámara de Diputados, para presentar el paquete económico 2025.

En su primera intervención, el funcionario federal aseguró que los criterios de política económica para sustentar un gasto que será de 9.3 billones de pesos, se basa en criterios realistas.

“Los criterios generales de política económica que sustentan este presupuesto están construidos sobre una base realista y prudente de la situación económica actual, tomando en cuenta los retos internos y globales, y estableciendo proyecciones que aseguran una consolidación fiscal responsable tanto en el corto como en el mediano plazo”, expresó.

Refrendó la estimación de crecimiento “moderado” de entre 2 y 3 por ciento el año entrante, y que este 2024 cierre con una evidente recuperación económica al acercarse al nivel del 2 por ciento.

Los ingresos serán de 8 billones de pesos, de los cuáles, aproximadamente 5.3 billones de pesos tendrán como origen la recaudación tributaria.

No habrá nuevos impuestos ni aumentos a los gravámenes existentes, añadió.

Respecto al déficit, recordó que se estima en 3.9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y estará alineado con el nivel de deuda de 51.4 por ciento de PIB, lo que representa “un esfuerzo responsable de consolidación fiscal” y permitirán a mantener la deuda en cifras constantes y sostenibles, lo que dará estabilidad financiera al país a mediano y largo plazo.

Destacó la inversión multimillonaria de más de 881 millones de pesos en programas prioritarios de política social, incluyendo los que ha propuesto la presidenta, para mujeres de 60 a 64 años y las becas para alumnos de educación básica, Rita Cetina.

La política económica de la presente administración se sustentará en cuatro pilares, incluyendo la eficiencia recaudatoria, la austeridad y la reorganización administrativa.

Estará enfocada a la política social y el impulso a inversión en sectores estratégicos, como el de los trenes de pasajeros.

El compromiso con la prudencia fiscal marca el inicio del nuevo gobierno que mantiene su compromiso con la justicia social, enfatizó.

A programas de política social se asignarán más de 880 mil millones de pesos, que incluyen programas prioritarios impulsados por la Jefa del Ejecutivo, como la pensión para mujeres de 60 a 4 años; así como la beca para estudiantes de educación básica, “Rita Cetina”.

Añadió que en salud no habrá recortes, por el contrario, se destinarán recursos 5.8 por ciento más elevados que los aprobados este 2024.

Al IMSS Bienestar se destinarán 160 mil millones de pesos, con el fin de expandirlo y digitalizar servicios.

Se aplicará el programa Salud Casa por Casa para adultos mayores con discapacidad, con dificultades para trasladarse a hospitales.

En cuanto a inversión en infraestructura, recalcó que habrá recursos para la modernización de puertos y vías férreas.

Defendió la inversión en trenes, al señalar que beneficiarán a las empresas, las entidades de la República, mejorarán la conectividad en el país, consolidarán a México como centro logístico, facilitarán el comercio y atraerán inversión extranjera en el contexto de la relocalización de industrias.

En las intervenciones de los congresistas, se cuestionó al secretario Ramírez de la O sobre los recortes en salud y medio ambiente, a las universidades públicas, cómo hará el gobierno para enfrentar y pagar la deuda de PEMEX con proveedores.

Le dijeron que las previsiones económicas para el año siguiente se sustentan en cifras y estimaciones “fantasiosas”.

Se le preguntó si coincide con diputados del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), sobre una necesaria reforma fiscal.

También, sobre el maltrato presupuestal a Jalisco que el gobernador de esa entidad acusa.

De igual modo, le pidieron aclarar por qué megaobras de la administración pasada, como el Tren Maya seguirá recibiendo recursos públicos en montos multimillonarios.

Ante los cuestionamientos de legisladores de la oposición sobre los recortes en el paquete económico, en comparación con este 2024, en sectores centrales como la salud, educación, medio ambiente y defensa nacional, el titular de Hacienda negó algunos señalamientos y confirmó otros.

Las asignaciones presupuestales a salud “no están bajando”, se están redistribuyendo el recurso público entre la Secretaría de Salud, el IMSS Bienestar, el ISSSTE.

Al rubro de salud, dijo, se otorgarán 180 mil millones de pesos más, 8.8 por ciento más que este 2024, sólo que su asignación no va sólo a la Secretaría de Salud.

Hubiera sido “una ironía” reducir los recursos al rubro de salud, luego de que el anterior gobierno invirtió recursos relevantes para atender a la población sin seguridad social.

Sobre la reducción al medio ambiente, reconoció el recorte y lo explicó.

Indicó que las “bajas” en ese rubro se deben a que en la anterior administración hubo recursos extraordinarios para concretar proyectos principalmente hídricos como la Presa El Cuchillo o el proyecto de Agua para la Laguna.

Respecto a los criterios de política económica, como el crecimiento estimado entre 2 y 3 por ciento, calificados como “fantasiosos” por la oposición, insistió en que son realistas.

No pueden coincidir con las cifras de los analistas económicos, que van cambiando cada mes o de manera periódica, mientras que los criterios de política económica para todo el año y en los que se basa el paquete económico, tienen que ser perfilados a mayor plazo y ser “más rigurosos”.

Se fundamentan en indicadores de gasto, el uso de tarjetas de crédito, consumo de combustibles, de electricidad e indicadores de recaudación fiscal. “Tienen que ser realistas”, remarcó.

Tras reconocer que en el verano de este 2024 México pasó un “bache económico” por distintas circunstancias internacionales, como interrupciones en el flujo de transporte marítimo, indicó que en 2025 no se puede asegurar que el país esté “blindado”, porque hay turbulencias geopolíticas.

Sin embargo, la planeación económica va “sobre lo razonable” y no obedece a escenarios extremos, aunado a que se espera que la economía global tenga un crecimiento moderado.

Sobre la baja en las perspectivas sobre México, anunciada por la calificadora Moody’s, el titular de Hacienda volvió a minimizar el hecho.

Explicó que la calificadora no anunció que bajaría la calificación de la deuda nacional, sino su “perspectiva” al respecto y con base en condiciones registradas en este 2024.

Agregó que no hay razón para que las consideraciones sobre la estabilidad de la economía nacional se degraden, porque se han hecho esfuerzos relevantes en consolidación fiscal a fin de bajar el déficit al 2.9 por ciento del PIB dentro de un par de años.

El nivel de la deuda en 2025 se estima en 3.9 por ciento del PIB, en 2026 se proyectará en 3.2 por ciento y en 2027 en 2.9 por ciento, el avance será gradual y ya está previsto, insistió.

De hecho, aseguró, México ya fue capaz de reducir el déficit de más del 5 por ciento, al 3.9 por ciento que se está previendo para 2025.

Sobre el gasto federalizado y reclamos de legisladores oriundos de Jalisco, afirmó que las participaciones y aportaciones tienen certeza jurídica por ley y no se otorgan de manera selectiva, sino a partir de fórmulas matemáticas y cronogramas.

“No hay discrecionalidad en participaciones y aportaciones”, aseguró.

Dijo que esas aportaciones serán las más altas de la historia y en el caso de Jalisco, no hay una discriminación presupuestaria.

Si bien esa entidad es una de las más sólidas económicamente, depende en un 86 por ciento de los recursos que aporta la Federación, destacó.

Respecto a la asignación de 40 mil millones de pesos en 2025 para el Tren Maya, obra cuyo costo se disparó hasta superar los 500 mil millones de pesos, según denunció la oposición, el secretario de Hacienda también justificó el hecho.

Indicó que el año entrante el Tren Maya comenzará a operar como transporte de carga y requerirá presupuesto para operar en esos términos y consolidarse.