La mayoría legislativa compuesta por Morena, PVEM y PT aprobaron en lo general la llamada «supremacía constitucional » donde modifican los artículos 105 y 107 de nuestra Carta Magna para establecer la improcedencia del juicio de amparo contra adiciones o reformas constitucionales, además de anular las controversias o acciones s de inconstitucionalidad

Este dictamen se aprobó por 340 votos en favor, una abstención y 133 en contra. Esto después de un debate de casi siete horas. Donde los legisladores de morena y aliados argumentaron que se busca llevar a la Carta Magna lo que ya se estableció en el artículo 61 de la Ley de Amparo, que significa alinear al Constitución Política una ley secundaria.

Durante la discusión los legisladores de oposición alertaron que la aprobación de esa “supremacía” implicaría únicamente crear una dictadura y la destrucción del estado de derecho y de los medios de defensa de los ciudadanos ante los abusos del poder.

El encargado de leer los términos del dictamen a discusión fue el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales Leonel Gody, el ex gobernador de Michoacán negó que con el dictamen se “desmonte el estado de derecho” o se atente contra la defensa de las garantías individuales.

En ese marco, aprovechó para enfatizar que el proyecto del ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá –mediante el cual se anularía la elección popular de jueces y magistrados— “es totalmente contrario a los supuestos del artículo 135 de la Constitución. Es una invasión de poderes y se arroga facultades legislativas”.

Por su parte, Lilia Aguilar (PT) denunció que “miente la derecha y sus rémoras” al señalar los posibles riesgos del dictamen, pues el juicio de amparo, la controversia constitucional y la acción de inconstitucionalidad seguirán existiendo para defender a los ciudadanos “contra acciones de autoridad y las leyes generales”.

La oposición “viene a causar miedo diciendo que vamos a terminar con la propiedad privada, cuando son ellos los que quieren mantener el poder de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que le han perdonado 63 mil millones de pesos a Ricardo Salinas Pliego”.

En sentido contrario, la panista Annia Sarahí Gómez Cárdenas subió a tribuna acompañada por el resto de los legisladores blanquiazules –quienes vistieron de negro y mostraron veladoras y lápidas de utilería, con las frases “estado de derecho” y “poder judicial”—para advertir que la “supremacía constitucional” significa la muerte de la república.

“Hoy, Morena está matando a la Constitución. En tan sólo ocho días pretenden redefinir el orden democrático, sin consultar a expertos ni académicos, y con un procedimiento legislativo plagado de vicios e inconsistencias. Estamos ante una regresión histórica, porque pretenden imponer la Ley de Herodes: o te sometes a Morena, o te jodes”, reclamó.

En ese mismo tono, cuestionó: “¿se les ocurrió la maravillosa idea de eliminar de la Constitución la última línea de defensa de los ciudadanos supuestamente para acabar con el ‘activismo judicial’ de la SCJN, cuando Morena tiene en sus filas a dos ex ministros que siguen cobrando una pensión?”

Por su parte, el emecista Sergio Gil Rullan lamentó que “este dictamen puede significar el fin de toda aspiración democrática para el país y el ingreso de México en una vergonzosa lista de regímenes totalitarios”, pues eventualmente abriría la puerta a ideas como permitir la reelección presidencial o regresar a un modelo de gobierno centralista y no federalista.

De su lado, el priísta Víctor Samuel Palma César puntualizó que “la omnipotencia de la mayoría destroza límites, avasalla y conduce por la vía de la democracia plebiscitaria, lo que rompe límites y contrapesos”.

Asimismo, recordó que el tema de la “supremacía constitucional” nunca le fue planteada a los electores en los comicios del pasado 2 de junio. “Ahora la sacan de manera sorpresiva, pero para colmo no lo es, porque es la supremacía de la mayoría. La ruta de las decisiones mayoritarias fue la que integró el fascismo en Italia y los que llevaron (al poder) al nazismo en Alemania”.

Tras la aprobación en lo general, se presentaron cerca de 300 reservas al dictamen, las cuales serán desahogadas en voz de 52 oradores.

Se espera que, una vez avalada en lo particular, la reforma se vote en las legislaturas estatales entre la noche de este miércoles y la madrugada del jueves.