La producción de automóviles en plantas mexicanas subió un 5,24 por ciento interanual en el primer semestre de 2024 hasta las 1.996.136 unidades, con lo que retoma la tendencia al alza tras un primer trimestre de estancamiento, informó este martes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

La exportación de vehículos ligeros se incrementó en 10,67 por ciento, hasta los 1.721.852, mientras que las ventas en el mercado interno se elevaron un 11,94 por ciento para ubicarse en 708.650, según el reporte del instituto autónomo.

El Inegi precisó que el 75,5 por ciento de los vehículos producidos fueron camiones ligeros y el resto automóviles. En el reporte destacó un desplome del 27,5 por ciento interanual en la producción de Audi, cuya planta en el estado de Puebla estuvo en huelga del 24 de enero al 18 de febrero por un desacuerdo entre los sindicatos y los empresarios por el incremento salarial para 2024.

También hubo reducciones interanuales en la producción de las plantas de Toyota (-22,9 por ciento), Stellantis (-13,5 por ciento) y KIA (-3,9 por ciento). Tan solo en junio, la fabricación de vehículos ligeros en México avanzó un 3,77 por ciento interanual hasta las 344.206 unidades.

Mientras que la exportación en el sexto mes del año se elevó un 3,3 por ciento con 295.742 vehículos, y la venta interna se incrementó en 8,26 por ciento a los 122.929.

La importancia de la industria automotriz para México radica en que representa casi el 4 por ciento del producto interior bruto (PIB) nacional y el 20,5 por ciento del PIB manufacturero, más que ningún otro sector, según la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

La información del Inegi proviene de 23 empresas afiliadas a la AMIA, Giant Motors Latinoamérica, Autos Orientales Picacho y Great Wall Motor México.

El sector automotor de México recuperó sus niveles prepandemia en 2023, cuando la producción creció un 14,23 por ciento anual, las exportaciones un 15,19 por ciento y las ventas internas un 24,36 por ciento. La industria automotriz mexicana repuntó en 2022 con un crecimiento de 9,24 % en la producción, después de la caída del 2 por ciento en 2021 por la escasez de chips semiconductores y el desplome de más del 20 por ciento en 2020 por la pandemia de la covid-19, que obligó al cierre de esta industria durante los primeros meses del brote.