Los cómputos distritales y la entrega de constancias de mayoría a las y los candidatos cerró una etapa importante en un proceso electoral pero este aún no termina, pues vendrán semanas en las que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en el plano federal, y los tribunales locales deberán resolver impugnaciones, así como el INE tendrá que determinar la composición definitiva del Congreso. Sin embargo lo que es un hecho, es que con independencia de los resultados en las urnas y su judicialización en los tribunales, debe quedar atrás la polarización política y la confrontación entre mexicanos.

La Confederación Patronal del Republica Mexicana (Coparmex), manifiesta en México no se puede  aspirar a mejorar como sociedad si mantiene la confrontación. Por tanto, después del proceso de elección popular que vivimos el pasado 2 de junio tiene que la cohesión social, para mantener un futuro.

El llamado sindicato patronal subraya que el respaldo de una gran mayoría equivalente al 59 por ciento de los electores a la virtual presidenta Claudia Sheinbaum, no puede entenderse como un cheque en blanco, y mucho menos debe ser asumido como una justificación para avasallar a las minorías.

“En un país que goza de una democracia electoral con 30 años de avances paulatinos, no puede ni debe haber cabida a una regresión; es indispensable la generación de consensos entre los grupos mayoritarios y las minorías, en aras de la consolidación de acuerdos democráticos”, enfatiza el comunicado.

Resalta  la Copsarmex que, México es y seguirá siendo un país plural, y si en el discurso se aprecia la intención de generar una sola visión y perspectiva, corresponde actuar con congruencia y llevarlo al plano de la acción. La futura presidenta tiene frente a sí una oportunidad histórica para establecer como sustento de su gobierno la recomposición de la cohesión social.

“Al igual que a los mercados, nos preocupan las primeras señales enviadas en el periodo de transición en ciernes. El Banco Mundial ha advertido que América Latina iniciará un proceso de desaceleración económica; mientras que la SHCP calculó en los Criterios Generales de Política Económica una tasa de crecimiento del PIB para 2024 entre 2.5% y 3.5%, el Banco Mundial redujo las expectativas a sólo 2%; eso significa que el gobierno tendrá que ajustar a la baja sus planes de recaudación y de gasto”, se explica en el comunicado.

La Coparmex también resalta que en el arranque de la siguiente administración será, por factores estructurales, complejo y por ello debe haber sensatez en los actores políticos para no recrudecer los factores de desaceleración y mucho menos privar al país de su potencial para atraer 35 mil millones de dólares de nuevas inversiones que podrían llegar gracias al fenómeno de relocalización de empresas o nearshoring.

Destaca que la reforma planteada al Poder Judicial y la celeridad con la que pretende discutirse, puede minar de forma irreparable la confianza para invertir en México, pues se advierte como una iniciativa que restaría independencia a ese poder y debilitaría al Estado de derecho. Ningún país miembro de la OCDE tiene, por ejemplo, un esquema de elección popular de jueces, magistrados y ministros.

“Lo decimos claro, más que pensar en reducir la independencia del Poder Judicial, se debe optar por materializar y una reformar que e ya fue aprobada para que dé los resultados esperados. La reforma constitucional de 2021 coincide en buena medida con la iniciativa de reforma presentada el pasado 5 de febrero de 2024, en el sentido que se busca que todas las personas tengan acceso pleno a la justicia y se erradique cualquier práctica de corrupción sancionando a los responsables.

Por último la Coparmex hace un llamado  a no perder de vista que México tiene todo para crecer, para generar mayor bienestar para las familias. Hay en frente un futuro próspero con esperanza, pero hacerlo posible implica no autosabotear ese potencial debilitando nuestra democracia. Es tiempo para permitir que los cambios y la transformación institucional planteada en 2021 madure para tener una justicia incluyente, es tiempo de que esa sea la base para la cohesión social.