Por Víctor Barrera
El inquilino de Palacio Nacional y varios de los “militantes” de Morena se han colocado como los principales obstáculos en la campaña de la candidata del macuspano, para alcanzar la continuidad del proyecto 4T en México.
Y ante lo difícil que resulta que el inquilino de Palacio de Nacional se quede callado, las palabras que vierte cada mañana para tratar de descalificar a sus adversarios, resultan como un bumerang hacia su candidata, porque todo lo que señala de manera negativa sobre la oposición, sale a relucir en la campaña o en la gente cercana a Claudia Sheinbaum.
Desde la llamada oligarquía que critica el tabasqueño, se hace presente en Morena al ofrecer puestos de elección popular a empresarios y empresarias o sus hijos e hijas, quienes asumen una diputación federal o senaduría.
O son empresarios que se ven favorecidos de manera extraordinaria en el otorgamiento de licitaciones o contratos del gobierno federal.
El nepotismo, que critico durante muchos años el de macuspana, se presenta en este sexenio con la participación de sus tres hijos mayores en algunos “negocios” combinado con el tráfico de influencia, o en los pagos que realiza en el pago de las colegiaturas de su hijo menor que son superiores al salario mensual que recibe como titular del Ejecutivo.
O la participación dentro de la nomina del gobierno federal de familiares de “militantes” que han apoyado al tabasqueño y que reciben este pago a través de la colocación de sus hijos o hijas hermanos, hermanas, tíos, sobrinos en un puesto dentro de la “alta burocracia”.
Recientemente el caso de Arturo Zaldivar, ministro en retiro, donde se investiga a varios de sus ex colaboradores por haber incurrido en algún acto “dudoso” y que el ministro en retiro lo ha tomado muy personal resulta negativo para la campaña de claudia Sheinbaum.
Pero esto ya fue reconocido por el inquilino de Palacio Nacional quien expresó que el ministro Zaldivar le ayudaba a resolver casos de interés del Ejecutivo, en clara alusión y violación a la independencia de los poderes del Estado. Comentarios que generaron preocupación y quizás por ello se inició la recepción de denuncias anónimas y se estableció un expediente que obligo a su investigación total.
Todo esto ha encendido los focos rojos en Morena, porque les preocupa que puedan perder los comicios federales. Ante ello han reactivado mecanismos para incidir en el pensamiento de la gente y que voten por la Candidata del macuspano.
Como el gastar millones de pesos en pancartas, pendones, mantas flyers, pinta de bardas, pago a personas que salen a las calles a quitar propaganda de la oposición. Ya no solo de Claudia Sheinbaum, que no levanta, sino de otros candidatos, que lamentablemente tampoco levantan como es el caso de Rocío Nahle en Veracruz o de Margarita González en Morelos o de Clara Brugada en la CDMX.
Esta última que, también se ha estancado y que posiblemente pierda el bastión que fue durante muchos años de la izquierda la CDMX. Esto porque existen alcaldías donde realmente no la conoce o no votarían por ella, pero en las alcaldías donde Morena gobierna, la división al interior de este movimiento es cada vez más notoria
Tan solo en Iztapalapa, donde Clara Brugada ya gobierno tres veces, la primera quitándole de manera inadecuada el triunfo que obtuvo “Juanito”, y las otras dos por imposición de Morena, esto sumado a que su administración no logro combatir el crimen que ha diario se vive en las colonias de Iztapalapa, que el tema de agua ahora si se padece en una alcaldía que tuvo o tiene varios pozos de agua y que su mala administración se ha convertido en el desabasto de este liquido en la demacración.
A esto se suma la imposición de la candidata a la alcaldía, Aleida Alavéz y de los diputados federales, como Gabriel García y locales, que están más cercanos a López Obrador que ha Sheinbaum.
A esto se suma también la otra “ocurrencia” del macuspano de realizar una gira de despedida en las 32 entidades federativas. Esto tratando de imponer su figura ante la de Sheinbaum y con ello obtener un mayor numero de votos.
Esto último muestra a Sheinbaum Pardo como una candidata débil que por ello ha aceptado en su campaña la imposición de gente del macuspano como lo es el propio Zaldivar y Clara Brugada y Ernestina Godoy.
En tanto López Obrador solo dejará en claro que él es Morena y la 4T y solamente Claudia Sheinbaum será el vehículo para mantener ese poder.