Al cumplir este domingo 87 años el papa Francisco, se convirtió en el tercer pontífice más longevo de la historia de la Iglesia católica. Hasta ahora el Papa que más años vivió fue León XIII; nacido el 2 de marzo de 1810 y electo al trono de Pedro el 20 de febrero de 1878, murió el 20 de julio de 1903, a los 93 años.
Curiosamente, en la planta baja de la residencia de Santa Marta, donde vive Jorge Bergoglio desde su elección, hay un busto de mármol de León XIII -de nombre secular Gioacchino Vicenzo Raffaele Luigi Pecci-, que suele aparecer en algunas fotos que se saca con sus huéspedes.
Después de León XIII, el Papa más longevo fue Clemente XIIente XII, nacido el 7 de abril de 1652, electo Pontífice el 12 de julio de 1730 y que murió el 6 de febrero de 1740, con casi 88 años. Y el papa Francisco ya superó a quien hasta hace poco era el tercero de esta lista, Clemente X, electo el 29 de abril de 1670, que murió el 22 de julio de 1676, diez días después de haber cumplido 86 años.
Quedó quinto en la lista de papas longevos Pío IX, que nació el 13 de mayo de 1792, se convirtió en sucesor de Pedro el 16 de junio de 1846 y murió el 7 de febrero de 1878, tres meses antes de cumplir 86 años. Su pontificado de 31 años, 7 meses y 22 días, es considerado el más largo de la historia de la Iglesia, si se descarta el de San Pedro, cuya duración es difícil de determinar.
El papa Francisco, que nació en Buenos Aires el 17 de diciembre de 1936 y fue electo el 13 de marzo de 2013, a los 76 años, siempre dijo que pensaba que iba a tener un reinado corto. “Tengo la sensación de que mi pontificado será breve… Cuatro o cinco años, o dos o tres”, comentó en una entrevista concedida en 2015.
Evidentemente esa intuición falló: en 2024 cumplirá 11 años de pontificado y más allá de una salud cada vez más frágil, va por más: “No está en mi agenda morirme”, le dijo recientemente a un amigo, según pudo saber La Nación, en momentos de preocupación por una bronquitis aguda que le impidió viajar a Dubai para la COP28, a principios de mes.
Francisco celebró su cumpleaños con pastel durante una audiencia festiva con niños el domingo por la mañana, y había carteles de “Feliz Cumpleaños” en la Plaza de San Pedro durante su bendición semanal al mediodía.
Francisco ha dicho que él también consideraría renunciar si su salud le impide continuar, pero más recientemente dijo que el trabajo del Papa es vitalicio.
Sin embargo, dos veces este año, la mala salud respiratoria de Francisco lo obligó a cancelar grandes eventos: en primavera, un ataque de bronquitis aguda lo llevó al hospital durante tres días y le hizo perderse la procesión del Viernes Santo en el Coliseo.
Más recientemente, un nuevo caso de bronquitis lo obligó a cancelar un viaje a Dubái para participar en la conferencia climática de la ONU. A Francisco le extirparon parte de un pulmón cuando era joven y parece ser cada vez más propenso a sufrir problemas respiratorios.
Fue hospitalizado nuevamente en junio durante nueve días para que los cirujanos le repararan una hernia abdominal y le quitaran tejido cicatricial de cirugías intestinales anteriores.
Las hospitalizaciones han planteado dudas sobre la capacidad de Francisco para continuar con los rigores trotamundos del papado moderno, que depende cada vez más de la persona del papa, dijo David Gibson, director del Centro de Religión y Cultura de la Universidad de Fordham. Con información de AP