El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), Jerome Powell, afirmó este miércoles que los tipos de interés se mantendrán altos el tiempo necesario, hasta que la inflación se reduzca hasta su objetivo del 2% y siga siendo baja de forma sostenida.
La Fed mantendrá «una postura de política monetaria que sea lo suficientemente restrictiva para reducir la inflación de manera sostenible al 2% con el tiempo» y los tipos seguirán altos «hasta que estemos seguros de que la inflación está en el camino hacia ese objetivo», dijo Powell.
Así lo apuntó en una rueda de prensa después de que la Fed anunciara una nueva pausa en las subidas de tipos de interés, tras las once alzas consecutivas que ha realizado desde marzo del año pasado. Los tipos permanecen así en la horquilla actual del 5,25 % y el 5,5 %, su máximo nivel desde 2001.
Powell no descartó por tanto que en diciembre, cuando se celebre la última reunión del año del Comité Federal de Mercado abierto (FOMC, por sus siglas en inglés), haya una nueva subida, aunque aseguró que en esta reunión no se ha tomado una decisión al respecto.
«Aún no hemos tomado la decisión», destacó y «ni siquiera hablamos hoy de tomar una decisión en diciembre».
A la pregunta de si ya se han empezado a plantear un horizonte en el que los tipos puedan bajar, Powell afirmó que el comité «en absoluto» está pensando «en recortes de tipos».
«No estamos hablando de recortes de tipos. Todavía estamos muy concentrados en la primera pregunta, que es: ¿hemos logrado una postura de política monetaria que sea lo suficientemente restrictiva como para generar inflación a lo largo del tiempo y de manera sostenible? Esa es la pregunta», afirmó.
El hecho de por cuánto tiempo permanecerán los tipos altos será una pregunta para hacerse en el futuro. «La cuestión de los recortes de tipos simplemente no surge porque creo que la primera pregunta es muy importante», insistió Powell, que reconoció que el proceso para reducir la inflación de manera sostenible al 2 % «tiene un largo camino por recorrer».
Como tras cada reunión, la Fed dijo en un comunicado que el FOMC seguirá evaluando los datos económicos que se conozcan durante las próximas semanas y los efectos que está teniendo la política monetaria sobre ellos.
Los indicadores económicos recientes, señala la Fed, sugieren «que la actividad económica se expandió a un ritmo fuerte en el tercer trimestre», al tiempo que «el aumento del empleo se ha moderado desde principios de año, pero sigue siendo fuerte» y «la inflación sigue elevada».
«Es probable que las condiciones financieras y crediticias más estrictas para los hogares y las empresas afecten a la actividad económica, la contratación y la inflación», señaló la Reserva.
Hasta junio de este año, en todas sus reuniones desde que comenzó la racha de subidas los miembros del FOMC, órgano encargado de decidir si se suben o no los tipos, decidieron subirlos.
Tras la pausa de junio en julio volvieron a aumentarlos y en septiembre de nuevo optaron por pausar las alzas.
Esta pausa se da en un contexto complejo para la inflación. Tras una racha de más de un año de bajadas desde el pico del 9,1 % alcanzado en junio de 2022, los precios registraron una subida de cinco décimas en agosto, hasta el 3,7 %, la segunda subida consecutiva, y se mantuvieron en la misma cifra en