El pleno del Senado de la Republica aprobó con 64 votos de Morena y sus aliados, contra 34 de la oposición, una reforma  beneficia más  los líderes y sindicatos que a los trabajadores, porque esta manifiesta que los descuentos de las cuotas sindicales  vuelva a ser obligatorio y vía nómina de las empresas.

Esta reforma contra  fue impulsada por el dirigente del sindicato minero, Napoleón Gómez Urrutía y por la aspirante a la dirigencia del gremio petrolero, Cecilia Sánchez García, ambos senadores por Morena.

La reforma, modifica artículo 110 de la Ley Federal del Trabajo (LFT) para permitir el descuento de las cuotas sindicales sea obligatorio  y vía la nómina de las empresas.

Con ello se deroga, una reforma impulsada también por Morena y festejada en su momento por la entonces secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, que estableció que era vía opcional al pago de cuotas sindicales y la no obligatoriedad de las empresas a descontarlo.

Al argumentar su propuesta de reforma Gómez Urrutia, manifestó que no se afectan los derechos de los trabajadores y acusó a la oposición de representar a la clase empresarial.

La oposición rechazo la aseveración del morenista y señalaron que estos cambios a la Ley benefician únicamente  a los líderes sindicales, que recibirán recursos de los trabajadores los cuales les descontaran de su nómina.

El senador Miguel Ángel Mancera,  coordinador del PRD,  recordó que existe una jurisprudencia reciente de la Suprema Corte en el sentido de que descontar cuotas sindicales vulnera la libertad de asociación de los trabajadores.