Tras la expiración del ultimátum de Israel, cuando decenas de miles de civiles no han podido salir del norte Gaza o resisten en el sur del territorio bajo constantes bombardeos y sin apenas agua potable ni alimentos básicos, las tropas israelíes se acumulan en la frontera con la Franja a la espera de la orden definitiva para iniciar la temida incursión terrestre. “La siguiente fase está cerca”, ha dicho el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, a sus militares a quienes ha visitado en el sur de Israel.
Los temores ante la inminencia de la invasión del norte de Gaza se han incrementado durante las últimas horas. Israel ordenó este viernes el traslado al sur de Gaza de toda la población residente al norte de Wadi Gaza, lo que equivalía a aproximadamente 1,1 millones de personas, la mitad de la población de todo el territorio palestino.
El fantasma de una incursión terrestre por el norte de Gaza sobrevuela sobre la población palestina desde esta semana. “Comenzamos la ofensiva desde el aire. Más adelante, también vendremos desde tierra”, dijo el ministro de Defensa, Yoav Gallant, a las tropas israelíes esta semana cerca de Gaza. Israel ha prometido destruir a Hamás, después de que sus combatientes rompieran la valla de alta tecnología que rodea la franja y cometieran un brutal ataque, matando a mil 300 personas, principalmente civiles, y tomando docenas de rehenes el fin de semana pasado.
El país ha movilizado a 360 mil reservistas, la mayor cantidad de su historia, y ha acumulado largas hileras de tanques en los alrededores de la frontera con Gaza, donde Hamas ha estado preparando defensas, incluidas redes de túneles, durante años.
En las horas anteriores a la finalización del plazo, las tropas de Israel se han preparado en determinados puntos próximos a la frontera con Gaza, según ha informado un portavoz militar israelí. Varias imágenes muestran decenas de vehículos militares desplegados en los alrededores de la Franja. “En torno a la Franja de Gaza, los soldados de reserva israelíes en formación se están preparando para la siguiente etapa de operaciones”, dijo el teniente coronel Jonathan Conricus, en una sesión informativa por vídeo a primera hora del sábado. “Están por toda la Franja de Gaza, en el sur, en el centro y en el norte, y se están preparando para cualquier objetivo que encuentren, sea cual sea la tarea”.
Mientras miles de palestinos huyeron el sábado del norte de la Franja de Gaza para evitar un esperado ataque terrestre del país vecino, los constantes bombardeos han continuado azotando a una población que se chocaba con el dilema de abandonar sus hogares en el norte del territorio o desplazarse hacia el sur. La orden de “evacuación” fue calificada por las Naciones Unidas como “simplemente imposible” y “extremadamente peligrosa” en los plazos proporcionados por Israel, que no ha dejado de atacar el territorio palestino.
Aunque el Ejército israelí aseguró que mantendría dos caminos abiertos para dejar escapar a la gente, el comité español de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) ha denunciado los constantes ataques sufridos en Gaza durante las últimas 24 horas.
Según Hamás, un ataque del ejército israelí mató en las últimas horas del viernes a 70 palestinos y ha herido a más de 200 personas mientras intentaban huir de la ciudad de Gaza tras advertir a los residentes de que tenían que marcharse hacia la sección sur de la Franja. Desde el inicio de la escalada militar, la cifra de palestinos fallecidos por los bombardeos israelíes en la Franja se ha elevado a 2.215, entre los que se encuentran 724 niños, según el Ministerio de Sanidad gazatí.