La Fiscalía General de la República (FGR) sufrió otro revés en el proceso judicial que lleva contra el exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, en el caso Obedrecht.
Esto porque el Primer Tribunal Colegiado de Apelación en Materia Penal confirmó el desechamiento de las pruebas bancarias que la FGR considera clave para demostrar los presuntos sobornos por 10.5 millones de dólares que Lozoya Austin recibió de la constructora brasileña.
Al resolver el recurso de apelación que la Fiscalía General de la República presentó contra la exclusión de comprobantes financieros de bancos suizos y de transferencias de recursos a empresas offshore, que ofreció como prueba de los sobornos, los magistrados del mencionado Tribunal Colegiado determinaron modificar la decisión del juez de control Gerardo Alarcón López, únicamente para admitir el medio de prueba relacionado con el procedimiento judicial iniciado en Nueva York contra Odebrecht, quedando fuera las pruebas bancarias.
En audiencia intermedia de marzo de este año, el juez de control del Reclusorio Norte, Gerardo Alarcón López, no admitió las pruebas de la FGR contra Emilio Lozoya referentes a información bancaria de la Confederación Suiza y comprobantes de las transferencias de recursos que Odebrecht, a través de distintas firmas offshore, realizó a las empresas Latin America Asia Capital Holding y Zecapan S.A, relacionadas con el exdirector de Pemex, al considerar que fueron obtenidas de manera ilegal por el Ministerio Público y se violó el secreto bancario.
La Fiscalía General de la República, la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y Petróleos Mexicanos (Pemex) pueden impugnar vía amparo la decisión del Primer Tribunal Colegiado de Apelación, por mayoría de votos de los magistrados, Manuel Bárcena Villanueva y Gabriela Guadalupe Escobar, con voto en contra del magistrado Alberto Villanueva.