Los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Javier Laynez, Loretta Ortiz y Yasmín Esquivel, se decidieron a acudir a la Cámara de Diputados a participar en el cierre del conversatorio organizado por la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y aliados, sobre la consulta y posible reforma al Poder Judicial, para cambiar el modo de selección de ministros, magistrados y jueces, para que sean votados en las urnas.
En representación del Pleno de la Corte, el ministro Javier Laynez, pidió a los legisladores no olvidar que el Poder Judicial no solo son los 11 integrantes del Alto Tribunal.
Coincidió con sus compañeras en la Suprema Corte, respecto a que el acercamiento con el Legislativo es necesario y en este caso fue “histórico”, “espontáneo y casi inédito”, ello, aunque los congresistas de Morena insistieron durante semanas en que acudieran a los foros realizados en el Palacio Legislativo.
Al cumplir la encomienda del Pleno, de recibir los resolutivos de la discusión promovida en el recinto parlamentario, el ministro Laynez Potisek enfatizó que se trató de un ejercicio que merece respeto.
Hizo dos peticiones a los legisladores federales, para que al revisar la situación en el Poder Judicial tomen en cuenta que no sólo se conforma por la Corte, sino por miles de magistrados, ministros, jueces y demás miembros.
Que los congresistas tampoco pierdan de vista que las decisiones tomadas en la justicia local, son mucho más relevantes para la ciudadanía, que las que se emiten en la Suprema Corte, aunque estas sean más “visibles”.
Por ello, manifestó el juzgador, es necesario atender el pendiente de mejorar y fortalecer la justicia local.
“Que ustedes nos ayuden y que ustedes estén conscientes, cuando se piense en el Poder Judicial de la Federación, no somos los 11 de Pino Suarez 2, somos más de 45 mil servidores públicos, actuarios, notificadores, secretarias, secretarios de estudio y cuenta, desde luego, juezas y jueces, magistradas y magistrados y que créanme, las decisiones que ellos toman ahí en sus circuitos muchas veces son mucho más importante que las que toma la Suprema Corte”, precisó.
A título personal, la ministra Yasmín Esquivel, envuelta en el escándalo del plagio de su tesis de licenciatura, afirmó que el Poder Judicial debe ser aliado de la sociedad y estar por encima de intereses de grupo, y también, tiene que abrirse a la autocrítica porque los ciudadanos desconfían.
Se declaró convencida “de que los tribunales judiciales no debemos ser ajenos a la crítica ni menos desconocer que hoy la sociedad desconfía en la impartición de justicia. Es mi convicción como lo he señalado, que estamos obligados a la autocrítica, a revisarnos, a evaluarnos, con una apertura de mente”.
Los ministros, jueces, magistrados y demás juzgadores, señaló, deben tener “apertura de mente” ante los cambios estructurales que requiere el Poder Judicial para responder a la exigencia de impartición de justicia gratuita, completa e imparcial.
Esquivel Mossa indicó que el Legislativo y el Judicial son un “binomio que no puede estar divorciado” y enfatizó que deben mantener la voluntad de cooperar para “transformar” al que ella representa.
En tanto, la también ministra afín al Ejecutivo Federal Loretta Ortiz, hizo un recuento de las distintas modalidades de selección de ministros en algunos países del mundo, así como las recomendaciones hechas por organismos internacionales defensores de derechos humanos, para que a través de esos procesos, se fortalezca la autonomía e independencia de los poderes judiciales.
Al mencionar casos como los de Canadá, Honduras, Argentina, Brasil y Chile, hizo notar que en esas naciones hay diversos mecanismos de nombramientos de jueces, que no necesariamente involucran el voto en las urnas.
No existe un modelo único de nombramientos, pero sí lineamientos mínimos que se centran en la necesidad de garantizar la independencia e imparcialidad de sus jueces, y evitar la “discrecionalidad” en la toma de esa decisión.
También en asegurar que los juzgadores sean nominados conforme a su capacidad profesional y experiencia en distintos rubros, transparencia y máxima publicidad, y evitando que los organismos judiciales se conformen por representantes de intereses políticos.
“Reafirmando que cualquier reforma al Poder Judicial debe asegurar que estas garantías mínimas de independencia sean consagradas constitucional y legalmente como presupuestos fundamentales para asegurar el acceso a la justicia a través de la garantía del debido proceso y el derecho de protección judicial”, expresó.
Al iniciar el encuentro al que finalmente acudieron los coordinadores de la oposición, el diputado de Morena, Juan Ramiro Robledo, defendió la postura de Morena y el Ejecutivo Federal, al afirmar que no se puede permitir en el país “el gobierno de los jueces”.