Al cierre de 2022 las finanzas públicas en lo general mostraron un desequilibrio, el cual, si bien es moderado en su interior, se percibe cierta fragilidad respecto a la sostenibilidad de los ingresos públicos y a la asignación del gasto público que no parece enfocarse a los problemas más importantes del país, alertó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
El organismo de análisis que dirige Carlos Hurtado López señaló que de acuerdo con la información de Hacienda durante 2022 los ingresos totales del sector público sumaron 6.6 billones de pesos, con un alza en los ingresos petroleros que crecieron 18.7% y la recaudación del impuesto sobre la renta que se incrementó 11.0 por ciento.
Lo cual se debió, por un lado, a los elevados precios internacionales del crudo y, por otro, a la mayor recaudación del Servicio de Administración Tributaria /SAT), por lo que ambas fuentes generaron excedentes sobre lo presupuestado.
El total de ingresos fue sólo 2.5% mayor al de 2021, debido a que los excedentes se utilizaron para subsidiar el precio de las gasolinas y el diésel. Cabe señalar que las fuentes de ingresos excedentes a los proyectados se hubieran podido usar para reducir la deuda pública o para fortalecer algunas prioridades de gasto que han sido desatendidas”, comentó el organismo.
Por su parte, en 2022 el gasto total del sector público ascendió a 7.6 billones de pesos, cifra que superó en 4.1% real el gasto del mismo lapso del año previo y fue históricamente el más elevado, tanto en términos nominales como reales. Y es que, en el gasto programable, las erogaciones para proveer bienes y servicios a la población, aumentaron 2.9% respecto a 2021, manteniéndose en 19.9% como porcentaje del PIB.
La composición de las erogaciones del erario refleja los objetivos políticos del gobierno”.
El gasto de Turismo, que incluye la construcción del tren Maya, registró un incremento de 355% anual en 2022, y el de la Secretaría del Bienestar aumentó 36.2%. En contraste, los gastos de la secretaría de Educación disminuyeron 4.2% y los de Salud fueron 1.5% menores a 2021.