Siete de cada 10 familias en México padecieron durante la pandemia de covid-19 la pérdida de empleo de uno de sus integrantes o un recorte en las remuneraciones, pero las transferencias de gobierno sólo llegaron a tres de cada 10, reportó el Banco Mundial.
De acuerdo con el organismo, sólo 30 por ciento de los hogares en México recibieron un apoyo público en el arranque de la crisis desatada por el confinamiento; sin embargo, el 70 por ciento perdieron ingresos, ya sea por un recorte en la remuneraciones de sus integrantes o porque alguno de ellos de perdió su fuente de trabajo.
En un reporte, el Banco Mundial mostró que la pobreza en el país aumentó en 4.2 puntos porcentuales, respecto al nivel previo a la pandemia de coronavirus, alza que prácticamente no fue mitigada con políticas fiscales para atender la emergencia.
En un recuento de los avances de la pobreza a escala mundial, el organismo califica de “poco probable” que en 2030 se logre erradicar la pobreza extrema a nivel global, pues se requeriría un crecimiento económico sin precedente para el resto de la década. La pandemia de Covid-19 “supuso el mayor revés” para esta tarea “y la guerra en Ucrania amenaza con empeorar las cosas”, advierte.
“El Banco Mundial estima que la pandemia empujó a 70 millones de personas a la pobreza extrema en 2020, el mayor aumento en un año desde que comenzó el monitoreo de la pobreza global en 1990 (es decir, en 30 años). Como resultado, se estima que 719 millones de personas subsistían con menos de 2.15 dólares (alrededor de 43.24 pesos) por día al cierre de 2020”, reporta el organismo.
En su informe Pobreza y prosperidad compartida, indica que 2020 marcó un “punto de inflexión histórico”, la desigualdad mundial aumentó por primera vez en 30 años, impulsada por los apoyos fiscales que se pudieron permitir los países de altos ingresos.
“Las personas más pobres soportaron los costos más elevados de la pandemia”, recalca el Banco Mundial. El 40 por ciento de la población más pobre tuvo, en promedio, pérdidas de ingresos de 4 por ciento, mientras en el 20 por ciento de la más acaudalada esta reducción fue de la mitad.
“El progreso en la reducción de la pobreza extrema se ha detenido esencialmente junto con el crecimiento económico mundial moderado”, comentó David Malpass, presidente del Banco Mundial.
Reconoció que a esta preocupación se suman el incremento de la desigualdad provocada por la inflación, la depreciación de las monedas y las crisis superpuestas más amplias que enfrenta el desarrollo. “Significa una perspectiva sombría para miles de millones de personas en todo el mundo”, advirtió.
El presidente del Banco Mundial consideró que en este panorama, una alternativa en mantener el statu quo, las políticas conocidas y las que hasta el momento se han llevado a cabo: “desaceleración del crecimiento mundial, tasas de interés más altas, mayor aversión al riesgo y fragilidad en muchos países en desarrollo”.
La otra ruta, “la necesaria”, requiere “ajustes de las políticas macroeconómicas para mejorar la asignación de capital global, fomentar la estabilidad de la moneda, reducir la inflación y reiniciar el crecimiento en el ingreso medio”, agregó.
El número de puesto de trabajo mejor pagados en México registró un drástico recorte en los últimos 12 meses, mientras que las plazas con los salarios más castigados comenzaron a multiplicarse, informó el Inegi.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reportó que entre julio de 2021 y el mismo periodo de 2022 desaparecieron un millón 43 mil 718 espacios laborales, que pagan más de dos y hasta más de cinco salarios mínimos.
Preciso que los puestos que ofrecen más de tres y hasta cinco minisalarios conformaron el segmento con el peor resultado; con 513 mil 237 plazas canceladas, que pagaban hasta 25 mil 930 pesos mensuales.
El instituto refirió que los espacios de trabajo con más de dos salarios mínimos se colocaron como la segunda categoría más afectada; con el cierre de 355 mil 401 plazas, donde se ofrecían un máximo de 15 mil 558 pesos.
Mientras que en la linea de empleos con más de cinco salarios mínimos, con sueldos superiores a 26 mil pesos mensuales, el recorte llegó a 175 mil 80 puestos, durante el periodo de referencia.
A través de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), el Inegi apuntó que –en contraste– los puestos de trabajo con los salarios más bajos mostraron un incremento de un millón 893 mil 938 espacios.
Detalló que la cantidad de plazas con un salario mínimo reportaron un aumento de un millón 196 mil y una paga mensual que apenas llega a cinco mil 186 pesos, equivalentes a 172.87 pesos diarios