Por Víctor Barrera
Ignacio Mier, coordinador de la bancada en la cámara de diputados, señalo que se augura que en los próximos meses habrá un trabajo intenso para sacar adelante la reforma electoral, que propone López Obrador y que Morena aprobara sin cambio alguno.
Entonces podríamos pensar que Morena, PT y PVEMM, solo asistirían a la cámara de diputados para alzar la mano y emitir su voto a favor a esta reforma, sin darle lectura alguna, afortunadamente la oposición podría mantener esta reforma en la congeladora, si es que no se llega a las famosas “concertasesiones”, y seria al final de esta legislatura o principios de la próxima, cuando se realicen los cambios pertinentes a esta Ley.
Debemos recordar que esta propuesta de reforma de López Obrador la hace arguyendo que en México debe imperar la democracia y que esta debe ser menos onerosa, por ello la propuesta de reducir el número de legisladores, principalmente los llamados plurinominales que responden más a los intereses de sus partidos que a los de la población.
La democracia se ha visto presente de manera más importante al permitir el cambio de régimen del PRI al PAN en el 2000 y Lugo en los últimos comicios federales, cuando asume la presidencia Peña Nieto y la más reciente cuando López Obrador también lo hace.
Ahora, en 2024, todavía no es claro si tendremos una decisión bajo un sistema democrático, o lo haremos ya en plena restauración autoritaria que pretende establecer López Obrador.
En México contamos con instituciones y organismos que actúan a favor de la democracia como lo son el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que han logrado sortear el embate que desde la Presidencia hace López Obrador.
Además, es el tabasqueño y su Partido Morena, quienes han empezado violentar las leyes electorales con candidaturas fuera de tiempo, uso de recursos públicos, acarreo y coacción del voto, actos que precisamente el oriundo de Macuspana se quejaba durante años y señalaba como herramientas del fraude utilizadas por los regímenes anteriores para evitar su llegada a la presidencia.
Entonces ya rumbo al 2024, se pretende que la renovación que habrá en el INE, favorezca a Morena y que las reglas para la elección de sus consejeros sean con beneficio al partido mayoritario.
En las últimas elecciones ha sido claro el impacto del reparto de dinero desde el gobierno. En las consultas, la mayor participación correspondió a los adultos mayores que querían mostrar su agradecimiento o que fueron convencidos de que no votar les haría perder el programa social que les apoya.
Por cierto, en este año, las pensiones no contributivas superan ya los 200 mil millones de pesos, y representan un 20 por ciento de las pensiones tradicionales, financiadas con cuotas. Este tipo de gasto con fines electorales nunca ocurrió en los 25 años de democracia que conocimos. También se ha observado que la actividad de los grupos criminales en las elecciones se ha incrementado, por lo menos en los comicios locales que se han celebrado estos años. Esos grupos que son punto de atención de López Obrador al señalar que ellos empujan la economía de sus localidades.
Entonces nuestra democracia está más en riego por la violación constante de sus reglas y no por sus instituciones, pero al parecer este régimen prefiere controlar todo y ser apoyado por grupos de dudosa actividad para mantener el poder.
Aún falta tiempo para los comicios federales del 2024, pero es el momento de evitar que un grupo de políticos y sus aliados eviten la verdadera democracia que la califica la misma sociedad para poner a sus incondicionales políticos, con el objetivo único de implementar un régimen autoritario que perdure por lo menos 90 años como lo hizo el PRI en el siglo pasado, sabemos cómo muchos de estos políticos emanaron del PRI y prendieron hacer todo esto y ahora lo aplicaran nuevamente para su beneficio y no para el de México y sus pobladores.
Por Víctor Barrera
Ignacio Mier, coordinador de la bancada en la cámara de diputados, señalo que se augura que en los próximos meses habrá un trabajo intenso para sacar adelante la reforma electoral, que propone López Obrador y que Morena aprobara sin cambio alguno.
Entonces podríamos pensar que Morena, PT y PVEMM, solo asistirían a la cámara de diputados para alzar la mano y emitir su voto a favor a esta reforma, sin darle lectura alguna, afortunadamente la oposición podría mantener esta reforma en la congeladora, si es que no se llega a las famosas “concertasesiones”, y seria al final de esta legislatura o principios de la próxima, cuando se realicen los cambios pertinentes a esta Ley.
Debemos recordar que esta propuesta de reforma de López Obrador la hace arguyendo que en México debe imperar la democracia y que esta debe ser menos onerosa, por ello la propuesta de reducir el número de legisladores, principalmente los llamados plurinominales que responden más a los intereses de sus partidos que a los de la población.
La democracia se ha visto presente de manera más importante al permitir el cambio de régimen del PRI al PAN en el 2000 y Lugo en los últimos comicios federales, cuando asume la presidencia Peña Nieto y la más reciente cuando López Obrador también lo hace.
Ahora, en 2024, todavía no es claro si tendremos una decisión bajo un sistema democrático, o lo haremos ya en plena restauración autoritaria que pretende establecer López Obrador.
En México contamos con instituciones y organismos que actúan a favor de la democracia como lo son el Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que han logrado sortear el embate que desde la Presidencia hace López Obrador.
Además, es el tabasqueño y su Partido Morena, quienes han empezado violentar las leyes electorales con candidaturas fuera de tiempo, uso de recursos públicos, acarreo y coacción del voto, actos que precisamente el oriundo de Macuspana se quejaba durante años y señalaba como herramientas del fraude utilizadas por los regímenes anteriores para evitar su llegada a la presidencia.
Entonces ya rumbo al 2024, se pretende que la renovación que habrá en el INE, favorezca a Morena y que las reglas para la elección de sus consejeros sean con beneficio al partido mayoritario.
En las últimas elecciones ha sido claro el impacto del reparto de dinero desde el gobierno. En las consultas, la mayor participación correspondió a los adultos mayores que querían mostrar su agradecimiento o que fueron convencidos de que no votar les haría perder el programa social que les apoya.
Por cierto, en este año, las pensiones no contributivas superan ya los 200 mil millones de pesos, y representan un 20 por ciento de las pensiones tradicionales, financiadas con cuotas. Este tipo de gasto con fines electorales nunca ocurrió en los 25 años de democracia que conocimos. También se ha observado que la actividad de los grupos criminales en las elecciones se ha incrementado, por lo menos en los comicios locales que se han celebrado estos años. Esos grupos que son punto de atención de López Obrador al señalar que ellos empujan la economía de sus localidades.
Entonces nuestra democracia está más en riego por la violación constante de sus reglas y no por sus instituciones, pero al parecer este régimen prefiere controlar todo y ser apoyado por grupos de dudosa actividad para mantener el poder.
Aún falta tiempo para los comicios federales del 2024, pero es el momento de evitar que un grupo de políticos y sus aliados eviten la verdadera democracia que la califica la misma sociedad para poner a sus incondicionales políticos, con el objetivo único de implementar un régimen autoritario que perdure por lo menos 90 años como lo hizo el PRI en el siglo pasado, sabemos cómo muchos de estos políticos emanaron del PRI y prendieron hacer todo esto y ahora lo aplicaran nuevamente para su beneficio y no para el de México y sus pobladores.