Por Víctor Barrera
Es indudable que por cada acto erróneo existe alguien que deja de cumplir su trabajo, por ello si se quiere encontrar a los responsables del sucedido el pasado lunes en San Antonio Texas donde un grupo de personas, entre ellos 22 mexicanos, de manera ilegal en ese país y dentro de un cajón de un tráiler, lamentablemente por falta de oxígeno fueron encontrados muertos y solo dos lograron sobrevivir.
Hay quienes señalan que la culpa la tienen los emigrantes porque salen de sus países de origen, de Centroamérica y México, principalmente para intentar lograr el sueño americano y pagan una gran cantidad de dinero, algunos apuntan que va desde los 2 mil hasta los 15 mil dólares, para poder llegar a Estados Unidos y en aquel país “cambiar su calidad de vida”.
Otros manifiestan que los culpables son los polleros y coyotes que, algunos de ellos con lazos al crimen organizado, han encontrado desde hace muchos años en el tráfico de personas un gran negocio y que en pocas ocasiones son detenidos y en su caso enjuiciados porque no se inicia la investigación al ser detenidos los emigrantes, porque estos no dan información de a quien le pagaron para pasarlos hacia el país norteamericano.
Habrá quine señale como culpables a los agentes del Instituto Nacional de Migración, porque muy pocas veces realizan la revisión de automóviles particulares y públicos, camionetas, autobuses o tráileres para cerciorarse de que quienes viajan en esos vehículos, desde la frontera sur de México hasta la frontera norte, son personas que tienen sus papeles de migración en orden o son mexicanos.
Algunos otros indican que las autoridades norteamericanas también han caído en el juego del crimen organizado y evitan confrontarlos, dejando pasar vehículos con emigrantes ilegales a cambio de recibir recursos económicos.
Otros apuntarán que los culpables son los secretarios de estado de las naciones involucradas y que tienen la función de establecer políticas públicas migratorias, a favor de proteger la vida de los emigrantes.
Algunos otros dirán que son los presidentes de los países de origen de los emigrantes, que no hacen lo posible por procurar un ambiente de trabajo y mejor calidad de vida de la gente
Sin embargo, esto solo se queda en palabras, porque desde hace muchos años, la migración ha sido parte de hombres y mujeres que, al no tener las oportunidades de crecimiento económico en su país, salen de estos en busca de llegar al país con la economía número uno del mundo y con ello resolver todos sus problemas económicos.
Esto provoca que cada vez sean más los vehículos que recorren el país con emigrantes hacinados en sus cajas sin que haya una acción de la autoridad.
Seguramente, a pesar de lo ocurrido el lunes pasado, estarán saliendo otros tráileres del sur de México, los cuales recorrerán el país para llegar a la frontera y cruzarla, esto posiblemente con la complicidad de autoridades.
Muchos de ellos llegaran al destino que han señalado los emigrantes, otros tantos no lo lograran, sin embargo, no se publicara o se evitara reducir en lo mínimo la reacción de la sociedad, lo que es cierto es que existe mucha gente que sigue pensando en lograr “el sueño americano”, pese a lo arriesgado y caro que resulta, pero que también podría cobrar su propia vida.