Los integrantes de la bancada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en la Cámara de Diputados, arremetieron contra sus pares del Parlamento Europeo, organismo que acusaron, está “dominado por la derecha” y en específico por empresas que tenían beneficios con anteriores gobiernos mexicanos.
En un comunicado oficial, los morenistas en San Lázaro acusaron a los eurodiputados de dejarse manejar por los consorcios a los que no mencionaron por nombre y cuyo fin es dañar la legitimidad del actual Gobierno Federal.
En un escrito de 10 puntos, los legisladores mexicanos del bloque oficialista rechazaron las consideraciones de sus homólogos de Europa sobre la situación de los periodistas y defensores de derechos humanos en México.
Lanzaron una serie de calificativos en su contra y en rechazo a los resolutivos emitidos la semana anterior, los cuales consideraron, van contra el actual Gobierno Federal.
Las recomendaciones hechas a México por el organismo internacional “carecen de sustento” y sus argumentos “son sesgados, injustos con los mexicanos y engañosos con los pueblos de Europa”, dijeron.
Afirmaron que por décadas, el Congreso de la Unión y el Parlamento Europeo han mantenido comunicación institucional, ajena a posiciones políticas e ideológicas, sin embargo, sus últimos resolutivos son cuestionables.
“Están llenos de adjetivos, información parcial que no considera fuentes oficiales. Dan como verdaderas las versiones de los adversarios políticos del Gobierno de México y del proyecto que encabeza el Presidente Andrés Manuel López Obrador”, reclamaron.
Insistieron en que los puntos de vista de los diputados europeos están influenciados por empresas, cuyos nombres no señalaron, pero que tuvieron privilegios en México en anteriores administraciones y ahora buscan afectar la legitimidad de la actual administración.
Criticaron a los diputados de Europa por no pronunciarse con firmeza sobre “el conflicto entre Ucrania y Rusia” y por no pedir la liberación del periodista Julian Assange, preso en Reino Unido.
Tras calificarlos de radicales y faltos de objetividad, los legisladores de Morena dijeron estar dispuestos a mantener comunicación abierta con ellos, “por las vías del respeto institucional”.
Ofrecieron proporcionar información sobre la situación en México, para que en el futuro, los pronunciamientos del Parlamento Europeo no se sustenten en un solo punto de vista y “solo una parte de la realidad nacional”.
Reiteraron el cierre de filas con el Presidente de la República y su respuesta a los eurodiputados, cuyos argumentos insistieron en catalogar como desinformados, sesgados, injustos e insostenibles.
Afirmaron que el Primer Mandatario mostró dignidad al salir en defensa de la soberanía nacional y exigir respeto a los extranjeros que cuestionaron las acciones de su gobierno.