El Banco de México (Banxico) recortó este miércoles su pronóstico de crecimiento para la economía en 2022.
La institución señaló que el rango de previsión va de 3.2 a 1.6 por ciento, con una estimación puntual de 2.4 por ciento.
El nuevo pronóstico del Banxico va en línea con lo estimado por la Secretaria de Economía, Tatiana Clouthier Carrillo, que señalaba un rango entre 2.5 o 2.6 por ciento
Sin embargo el Banxico mejoró sus expectativas para el PIB de México de cara a 2023: el pronóstico para ese año es un crecimiento puntual de 2.9 de por ciento, comparado con el 2.7 por ciento del informe previo.
Esta actualización se da después de que en febrero, el Banxico aumentó por sexta vez al hilo su tasa de interés, que ahora está en 6 por ciento. La próxima decisión de política monetaria de la institución se dará a conocer el próximo 24 de marzo.
Sobre los resultados e este año, el Banco Central mantuvo su expectativa del informe correspondiente a julio-septiembre de 2021, señalando que espera la creación de entre 560 mil y 760 mil empleos para este año.
En lo que respecta a 2023, Banxico espera una variación de entre 510 y 710 mil puestos de trabajo.
En la medición de inflación, luego un nuevo aumento a la tasa de interés de febrero, el Banco de México también elevó su pronóstico para la inflación, al calcular que cerrará 2022 en 4 por ciento, justo en el límite superior de su rango objetivo (3 por ciento +/- un punto porcentual).
El Banxico no modificó ese pronóstico en su informe trimestral de octubre-diciembre de 2021, aunque agregó algunas consideraciones: de acuerdo con el banco, los efectos de la pandemia en la inflación subyacente (que es aquel que excluye de su contabilidad los productos de alta volatilidad de precios), se irán desvaneciendo con el paso de 2022, para situarse en niveles cercanos a 3 por ciento en el segundo trimestre de 2023.
Los choques derivados de la pandemia “han resultado ser de magnitud y duración mayor a la anticipada. El desbalance entre oferta y demanda en diversos mercados a nivel mundial continúa ejerciendo presión sobre los precios de los insumos y productos finales, influyendo sobre los precios al consumidor de mercancías y servicios en nuestro país”, apuntó el Banxico en el informe trimestral.
La inflación se ubicó en 7.22 por ciento en la primera quincena de febrero, impulsada por el gas doméstico LP y gasolina de bajo octanaje, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).